Levante-EMV, Valencia

Los consellers Alicia de Miguel, Gema Amor y Miguel Peralta así como el presidente de la Diputación de Alicante, José Joaquín Ripoll, insistieron ayer en la necesidad de que el partido expulse al ex subdelegado del Consell en Elx, Manuel Ortuño, tras que este profesara nuevos insultos a Ripoll en una carta dirigida a dos concejalas alicantinas. En la citada misiva, Ortuño asegura que Ripoll «abusa de su debilidad en la ingestión de refrescos alcohólicos». El ex delegado del Consell no se queda ahí sino que arremete contra la diputada nacional Enriqueta Seller, a quien Ortuño llamó «puta» y «retrasada mental», descalificaciones por las que ha sido condenado y que precipitó su salida como alto cargo de la Generalitat.

La carta, cuyo contenido publicó ayer el diario El Mundo, ha causado indignación entre dirigentes del PP, fundamentalmente entre los zaplanistas que llevan tiempo pidiendo que se resuelva su expediente de expulsión. Ortuño llega incluso a referirse a supuestos episodios íntimos de Seller que «siendo casada y con hijos, comenzó a mantener relaciones sentimentales con el primo de Eduardo Zaplana y diputado nacional también, Paco Murcia». La consellera Alicia de Miguel fue comedida en sus declaraciones a los medios porque, dijo, no querer que se malinterpreten sus palabras. No obstante, recordó que hace tiempo que se pide la expulsión de Ortuño y que es una decisión que corresponde a la dirección del partido. Apuntó que la actitud de Ortuño le da «tristeza y pena» y consideró que hay que «dignificar la vida política», un trabajo que, en su opinión, «es un esfuerzo en el que todos tenemos que estar y trabajar a diario». «Pasión de Gavilanes es por la tarde, es un guión escrito y una telenovela, y quien quiera que la vea por la tarde», manifestó.

Por su parte, la consellera de Cooperación, Gema Amor, quien junto con De Miguel firmó en las Cortes un manifiesto de reprobación a Ortuño calificó de «deleznable»la actuación del ex subdelegado del Consell y lamentó la «reaparición mediática de Ortuño insultando y demostrando que para el la dignidad no existe». «Ni en el ámbito político ni en el personal debe agredir verbalmente a las a mujeres», dijo. El conseller y secretario general del PP en la provincia de Alicante, Miguel Peralta, pidió que de manera inmediata las medidas disciplinarias contra Ortuño. Por su parte, Ripoll dijo que se trata de un hecho de «violencia verbal, totalmente fuera de lugar y repudiable», y agregó que mantiene su voluntad de que Ortuño abandone el PP.

Mientras la secretaria general del PPCV, Adela Pedrosa, aseguró que la dirección el partido va a analizar las declaraciones de Ortuño y a partir de ahí se decidirá que hacer. Pedrosa pidió respeto hacia todo el mundo y por ello, apuntó, «vamos a ver que ha dicho realmente Ortuño y haremos lo que tengamos que hacer». Aseguró que la decisión se tomará pronto.