El acalde de Enguera, Óscar Martínez firmó ayer un decreto que insta a la Generalitat a suspender las talas de madera en los montes de Enguera. Durante el mes de febrero, los servicios técnicos municipales trabajaron en la elaboración de un extenso informe sobre el grado de ejecución del plan de gestión forestal y han detectado que la adjudicataria ha vulnerado el contrato de explotación de la biomasa en zonas como La Peraleja y Loma Espesa.

Los resultados han conducido al alcalde a dirigirse a la Conselleria de Medio Ambiente para rogarle que efectúe los trámites oportunos como órgano competente para decretar la suspensión. «No vamos a permitir que los incumplimientos por parte de la empresa pongan en duda un plan de gestión perfectamente válido, realizado con criterios técnicos y aprobado por los organismos autonómico y europeo», indicó ayer Martínez. «Es como si el proyecto de una construcción se pone en duda porque la constructora lo ejecuta mal», ejemplificó el munícipe, cuya decisión ha obtenido el espaldarazo de la Plataforma Forestal Valenciana, que aglutina 35 colectivos de ingenieros, propietarios y ayuntamientos forestales, universidades, empresas y sindicatos agrarios. «No se puede permitir que la gestión forestal sostenible como elemento de conservación y mejora ambiental se ponga en duda porque una empresa ejecuta mal los trabajos forestales». Martínez insiste en que «el plan de gestión es necesario para asegurar la sostenibilidad ambiental, social y económica de los montes de Enguera y debe ejecutarse tal y como está previsto en los pliegos de condiciones». En las últimas semanas, la presión de las asociaciones ecologistas por el fuerte impacto ambiental provocado por los trabajos se ha intensificado. Los colectivos AE-Agró y Bosc Viu denuncian actuaciones excesivamente agresivas y talas abusivas en suelo forestal.

La pelota, en el tejado del Consell

Ahora la pelota está en el tejado de la conselleria. El director general de Medio Natural y Evaluación Ambiental se comprometió hace una semana a que su departamento revisaría el contrato vigente y paralizaría los trabajos si detectaba incumplimientos.