David Mateo (Valencia, 1976) era hasta hace no demasiado Tobias Grumm. Exigencias del mercado de la literatura fantástica. "Fueron los primeros libros de fantasía épica. El editor decidió que tal como estaba la situación del género en España tenían que salir con un pseudónimo. Hace cinco años, o salías con un nombre centroeuropeo o vender fantasía era muy complicado", explica el autor, que ya ha recuperado su nombre real y con él firma Noches de sal (Grupo Ajec), un thriller fantástico ambientado en una Valencia moderna de regusto gótico y siniestro.

"Tras leer muchos libros ambientados en muchos lugares, ¿por qué no Valencia? Es una ciudad de recovecos oscuros y siniestros -se reivindica el escritor-. Es mediterránea, pero si te pierdes por el Carmen o Russafa encuentras un montón de callejuelas que pueden causar pavor".

El género fantástico es "un microcosmos" complejo en España, con unos pocos miles de lectores adultos muy fieles y un aire de marginalidad. Mateo sueña con romper ese círculo, porque "España es por tradición un país de género fantástico. No hay más que ir a Borges o a las divagaciones del Quijote" Con Noches de sal ha apostado por una editorial andaluza puntera en el género y una tirada más amplia de lo habitual.

"Book-trailer" de Luna

Como en los lanzamientos internacionales, la novela cuenta con un book-trailer -una presentación cinematográfica de dos minutos, como las de las películas-, que lo ha realizado la directora valenciana Luna (Yo, puta). La presentación del libro y el tráiler fue uno de los actos más concurridos en la última Fira del Llibre: hubo que hacer tres proyecciones consecutivas porque no había espacio en la sala para todos. Mateo afirma que hay ya negociaciones para una película.