Vicente Ruiz ´El Soro´ estaba anunciado ayer para hacer el paseíllo en Puebla del Río, en un festival en el que reaparecía en los ruedos José Ortega Cano, después de sus problemas con la justicia. «Cuando me llamó Morante para invitarme a tomar parte en él me dio una gran alegría. Se trataba de un festejo para recaudar fondos para gente que lo necesita como es Cáritas. Y encima me permitía alternar con mi compadre Ortega Cano, quien volvía a los ruedos después de lo mal que lo pasado por avatares de la vida. Me une con él una grandísima amistad, y por eso me hace mucha ilusión estar con él».

Para Vicente, el balance de la temporada es satisfactorio. «Hombre, no es para menos. Después de tantísimos años de sufrimiento y operaciones, poder hacer el paseíllo en la feria de fallas, en mi plaza de toros de Valencia y en una tarde importante con dos figuras del toreo, fue algo inigualable. Además, puede sentir el cariño que todavía me tiene el público, y creo que demostré que, a pesar de mis dificultades físicas, soy capaz de dar la cara, matar los toros y estar a la altura de cualquiera».

Con todo, su campaña no ha sido tan intensa como él quería. «Yo me planteaba torear unas diez corridas de toros, no más. Y aparte de darme este gusto, hacerme con un dinerito, que nunca viene mal. Pero la fractura de vértebras de fallas me tuvo parado cinco meses».

En cuanto al futuro, asegura: «Yo quiero seguir toreando. Estos dos años he matado corridas muy serias, como la de Valencia. Un corridón con presencia, y que además tuvo mucha casta y motor. Y me vi capaz frente a él. En Febrero quiero confirmar la alternativa en México, y luego torear en Fallas. Y también en Sevilla, donde Morante me ha dicho que en una de las cinco corridas en las que está anunciado allí torearé con él».

Pasado mañana Vicente va apadrinar la presentación de la novela que Nieves Herrero ha escrito sobre la figura de Luis Miguel Dominguín y sus amores con Ava Gardner. «Agradezco que se hayan acordado de mí para este acto. Yo admiraba mucho a Luis Miguel, porque fue un excepcional personaje tanto dentro como fuera de la plaza».

El año que viene alternará su labor como torero con la de apoderado del Cristian Climent. «Estoy muy ilusionado. Firmamos el contrato hace unas semanas y ya las dos novilladas que toreó en El Puig revelaron que es un torero a tener en cuenta y que tiene unas enormes posibilidades de futuro. Yo trato de respetar su personalidad, ya que tiene un extraordinario concepto. Pero también intento inculcarle la raza y las ganas de ser torero. Y entre su clase y el temperamento que le estoy transmitiendo, yo creo que Valencia puede tener un torero importante en el futuro». Para el próximo 6 de diciembre está preparando otro festival que será en Foios, con motivo de su semana taurina.

Y en cuanto la situación de crispación que se está viendo con los antitaurinos y la reciente supresión de la declaración de la fiesta en Valencia como BIC, Vicente manifiesta que «es una pena, los toros en Valencia están enraizados en la propia idiosincrasia de todos y cada uno de sus pueblos y localidades. Querer legislar ahora para no proteger la fiesta, e incluso atacarla, me parece un despropósito. Y que además nos recoge el verdadero sentir popular de los valencianos».