Hoy es uno de esos días en que nada de lo que digas sirve para explicar lo que sentimos los pilotos tras perder a un compañero en la pista. Nada importa... Es muy muy fuerte que una persona como Marco Simoncelli ya no esté con nosotros. Ahora mismo mis lágrimas no me dejan pensar. No entiendo por qué tienen que pasar estas cosas. Marco sólo tenía 24 años y se nos ha ido. Como Shoya Tomizawa el año pasado, se ha dejado la vida haciendo lo que le gustaba, su deporte, la pasión de su vida... Era un piloto muy valiente, era un gran piloto. Al igual que a Shoya, llevaré siempre en mi corazón a Marco. En días como éste te preguntas dónde está Dios, por qué no podemos impedir que pasen cosas como ésta. Me he enterado del fatal desenlace ya en el aeropuerto, junto a mis compañeros, y la verdad es que nadie daba crédito. Se nos ha caído el mundo encima. El viaje de regreso, con tantas horas de avión por delante, va a ser uno de los más tristes de nuestras vidas.

No sé si tiene sentido hablar de mi carrera de ayer, pero tengo un compromiso con todos vosotros y, al menos, quiero explicaros lo que ocurrió. En Malasia me he vuelto a llevar la medalla de chocolate con el cuarto puesto. Todos los entrenamientos fueron realmente bien. Desde el viernes comenzamos a rodar en tiempos rápidos y mi compañero Nico Terol y yo nos destacamos del resto. Tanto que nos jugamos la «pole» a la última vuelta.

En el «warm up» de ayer, antes de la carrera, vimos que había surgido un problema en la moto que no podíamos solucionar a tiempo. Aún así, me mentalicé para quitarme de la mente esta circunstancia y realicé la carrera con las pilas cargadas a tope. En los primeros giros el motor se frenaba pero poco a poco se fue limpiando y funcionaba mejor, por lo que fue recuperando posiciones hasta llegar al grupo de cabeza y así marcar la segunda vuelta rápida de carrera. Después se sucedieron los adelantamientos y yo no llegaba a las frenadas con la distancia suficiente para pasar. En la última vuelta vi la circunstancia de Nico, por lo que decidí ir a por Zarco para intentar restarle puntos, pero no pude. Igualmente estoy convencido de que Nico tiene todas las papeletas para llevarse el título en Valencia.

Quiero dar todo mi apoyo y fuerza a la familia de Marco Simoncelli y a su equipo. Por mucho que lo queramos imaginar, su sufrimiento debe ser terrible. Es una tragedia.