El rugby, al contrario que otros deportes como el fútbol, tiene tres tiempos. En los dos primeros hay un marcador, un cronómetro y unos jugadores que luchan por un balón, pero en el tercero todo esto desaparece en pro de buena comida y bebida, de charlas distendidas, de comentarios sobre el partido y sobre muchos otros temas. Ayer, por ejemplo, la tesorera del CAU, Amparo Segura, y el presidente del Tecnidex, Francisco Baixauli, conversaban tras el choque en un tono muy amistoso y destacaban la importancia de que «el rugby en su conjunto siga creciendo en Valencia y en la Comunitat Valenciana».

Ambos valoraban la importancia de que los niños y niñas hubieran disfrutado toda la mañana de partidos y convivencia. Así, Segura indicaba: «Transmitimos a nuestros niños los valores del deporte del respeto y la colectividad. Que jueguen en grupo es importante porque también los formamos para que en el futuro sepan trabajar en equipo en las empresas». Ella comentaba con Baixauli la importancia de que equipos de ambos clubes entrenen a veces juntos porque eso les ayuda a todos a crecer y se emplazaban a más reuniones conjuntas e iniciativas. Baixauli, por su parte, incidía en el mensaje de «promover los valores del el respeto, la solidaridad y el trabajo», y aseguraba que «aquí no hay ni una sola mala palabra al árbitro», algo que quedó reflejado durante el encuentro.

Por su parte, dos ilustres veteranos de ambos equipos como Mikel Gimeno y Eduardo González veían juntos el partido y luego reconocían que este tipo de derbis son «todo» para ellos y destacaban el gran momento que se está viviendo en Valencia con cuatro clubes en División de Honor B.