El juez de la Audiencia Nacional Fernando Andreu ha admitido a trámite también la querella presentada por la plataforma "15MpaRato" contra los exdirectivos de Bankia que impulsaron en 2011 la salida a bolsa de la entidad, entre los que se encuentra el exvicepresidente del Gobierno Rodrigo Rato y José Luís Olivas. Así, el magistrado ha admitido la personación del colectivo 15-M, cuya querella se interpuso en nombre de una decena de pequeños accionistas de la entidad, como acusación particular en la causa. Especifica que estos afectados perdieron 106.000 euros.

El magistrado ha decidido acumular esta querella a la presentada por el partido Unión, Progreso y Democracia (UPyD), ya admitida la pasada semana. Según explica Andreu en el auto hecho público ayer, su decisión se enfrenta al criterio establecido por la Fiscalía que se pronunció en contra de su admisión y de la "imputación en este momento de conductas delictivas". Según refleja el juez en su auto, el Ministerio Fiscal entiende que "en este momento inicial de la instrucción de la causa (...) no es posible establecer si se han producido hechos penalmente relevantes y en consecuencia, tampoco imputar conductas delictivas a determinadas personas físicas sobre la base de su pertenencia al Consejo de Administración".

"A falta de esa necesaria concreción, siquiera sea provisional, de los hechos, en este momento no cabe hablar de perjudicados por unas conductas delictivas inconcretas y respecto de las que, lógicamente, no puede establecerse el alcance de la imputación", asegura la Fiscalía. La querella del 15-M se dirige también contra Bankia como persona jurídica e imputa a Rato y el resto de miembros del anterior consejo los delitos de falsedad de contabilidad para captar capitales en los mercados secundarios, estafa en documento mercantil, falsificación de cuentas e intervención fraudulenta y desleal.

Al igual que UPyD, el 15M solicita la intervención judicial de la entidad, al entender que esta medida "apaciguaría a los mercados". El juez se remite respecto a esta petición, a la vista fijada para el próximo día 23 de julio, en la que se estudiará la conveniencia de aplicar esta medida. No obstante y en contra de este criterio, el juez defiende que "al menos como hipótesis" no resulta "ni absurdo ni irracional" que los hechos imputados a Rato y su consejo de administración sean "constitutivos de delito".

"Las cuentas presentadas por la entidad querellada presentan una exagerada diferencia en muy breve espacio de tiempo", explica el juez que añade que la actuación de Bankia ha causado "numerosos perjuicios, no solo a los accionistas sino a la sociedad y a la economía nacional en su conjunto". La supuesta actuación delictiva que el 15M quiere que se investigue consistiría en la ocultación de las cuentas de la compañía, que se aseguraba que tenía 300 millones de beneficio cuando se produjo la salida a bolsa de la entidad y su proceso de ampliación de capital. "Si los accionistas hubieran conocido las pérdidas, no habrían metido su dinero", señaló el abogado.