El enfrentamiento que sostienen Rusia y Ucrania desde principios de 2014 y cuyas consecuencias finales son por el momento impredecibles está afectando de lleno a los intereses comerciales del sector hortofrutícola español, y muy en particular al de la Comunitat Valenciana. Las exportaciones de frutas y hortalizas de la autonomía al país moscovita ya se han desplomado un 13 % en el primer trimestre de este año, en comparación con idéntico período de tiempo de 2013, según reconoció ayer en declaraciones a Levante-EMV el subdirector general de la asociación de productores y exportadores Fepex, José María Pozancos.
La puntilla al negocio exportador, y en consecuencia a los agricultores, la acaba de poner el presidente ruso Vladimir Putin, quien acaba de firmar un decreto para la prohibición total de importaciones de ternera, cerdo, verduras, frutas y hortalizas; así como de carne de ave, pescado, quesos, leche y productos lácteos procedentes de la UE. Este conflicto comercial si se mantiene el veto durante un año, tal como han anunciado las autoridades rusas echará por los suelos la segunda parte de la campaña de frutas y hortalizas, ya que aquel país es el primer mercado fuera de la Unión Europea.
Segundo mercado en Europa
La Comunitat Valenciana exportó bienes a Rusia valorados en 623 millones de euros durante 2013, de los que una cuarta parte fueron alimentos. Además, a autonomía es la principal exportadora de España al aglutinar la mitad de la ventas nacionales al país moscovita, con lo que se juega un negocio de 151 millones de euros. Fepex teme una repercusión negativa sobre los precios y sostiene que «puede afectar negativamente al conjunto del mercado comunitario porque puede provocar excedentes en determinados países con mayor dependencia del mercados ruso», según Pozancos. Las ventas de frutas y hortalizas a Polonia, Alemania y Holanda también se verán afectadas, ya que estos países reexportan a Rusia.
El mercado ruso ha sido un mercado emergente en los últimos años y por ejemplo en la Comunitat el valor de las exportaciones agroalimentarias a Rusia. Un centenar de millones de euros corresponde al valor de las frutas; 29 a legumbres y hortalizas y 10, a conservas vegetales y zumos. El presidente de AVA-ASAJA, Cristóbal Aguado, aseguró ayer que la agricultura valenciana sería una de las más damnificadas por su condición eminentemente exportadora, y por el liderazgo comercial en sectores como cítricos y caqui. En su opinión, esta resolución supone «un nuevo golpe para los agricultores valencianos en un año negro marcado por los bajos precios, la sequía o los temporales de granizo». La Unió de Llauradors lamentó que, una vez más el sector agrario, «sea blanco de las disputas políticas entre la UE y otros países y que como consecuencia de lo anterior los agricultores sean quienes sufran las mismas.
