La piscifactoría Acuigrup Maremar, del exministro recientemente fallecido Antonio Asunción y el empresario Társilo Piles, se encuentra entre las compañías insolventes que ha descubierto el Instituto Valenciano de Finanzas (IVF) y cuyos créditos fallidos no se provisionaron en 2014, según ha podido saber Levante-EMV. Esta sociedad, en la que también entró como accionista el Banco de Valencia en una operación que investiga la Audiencia Nacional, se encuentra entre los 11 millones de agujero de la cartera privada del IVF que el Consell del PP escondió y que han aparecido ahora.
Como ha venido contando este periódico, el IVF ha detectado un agujero de 58 millones de euros que generó unas pérdidas al banco público en 2014 de 35,3 millones. La entidad que dirige Manuel Illueca tendrá que reformular las cuentas e inyectar capital. Illueca ha solicitado un informe a la Intervención de la Generalitat para conocer al detalle lo ocurrido y por qué.
El Instituto Valenciano de Finanzas solicitará al Consell una ampliación de capital que superará los cien millones de euros, según anunció ayer Manuel Illueca. Este organismo pedirá al Gobierno valenciano que las deudas que tiene con la Generalitat pasen a ser capital del IVF, y que se concretan en un pasivo actual de 75 millones al que se añadirá el vencimiento de deuda de este año, con lo que se superarán los cien millones. No obstante, Illueca precisó que se está evaluando el importe de esa recapitalización, ya que el capital social del IVF es de 125 millones que ahora se verá reducido prácticamente a la mitad.
Entre los préstamos que han puesto en problemas al IVF se encuentra el de la piscifactoría Acuigroup. Además del Banco de Valencia, que convirtió su deuda en acciones en una operación ahora investigada por la justicia, la firma de Asunción y Piles también recibió préstamos del Instituto de Crédito Oficial (ICO), Sepides, el IVF y NCG. En total, el pasivo llegó a ser de 42 millones en 2012 aunque el banco público valenciano ya da por perdida su parte al entrar en liquidación.
Illueca presidente de la SGR
Por otro lado, la Sociedad de Garantía Recíproca (SGR) procedió ayer a la reordenación interna que precisaba para evitar que la Generalitat tuviera que asumir como déficit público la cuantiosa deuda que acumula la entidad avalista. Así, el consejo de administración acordó que la participación de la Generalitat baja del 55 % al 40 %, aproximadamente, lo que implica una disminución de capital cercana a los 20 millones de euros que pasarán al fondo de provisiones técnicas de la SGR.
Esos 20 millones, por tanto, acabará anotándoselos como pérdidas el IVF. La decisión venía obligada por la Intervención General del Estado, que entendía, tal como informó ayer en un comunicado la SGR, que al superar la administración el 50 % del reparto accionarial la sociedad entraba a formar parte del sector público y que su deuda computaría junto a la de la Generalitat.
Paralelamente, el consejo acordó el nombramiento del director general del IVF, Manuel Illueca, como nuevo presidente de la sociedad avalista. Asimismo, dio su visto bueno al informe que permite la modificación de los estatutos de la SGR. Este punto del orden del día debe ser ratificado por la junta general e incluye que el límite en la participación de la Generalitat estará en el 45 % del capital. Además, se reduce el número máximo de consejeros. La SGR ya recortó la cifra de vocales.
