El Gobierno de Mariano Rajoy anunció ayer que abonará a los empleados públicos del Estado la parte pendiente de la paga extra de diciembre suprimida en 2012. Lo hará, según dijo, «en lo que queda de este mes o a lo largo de mayo». Mientras revelaba esta intención, curiosamente a dos meses de unas hipotéticas elecciones, el mismo Ejecutivo elevó la previsión de déficit para 2016 al 3,6 % del PIB, ocho décimas superior al permitido por la Unión Europea, y al 2,9 % para 2017, 1,2 puntos mayor al obligado por la UE. Antes esta situación, el ministro de Economía en funciones, Luis de Guindos, pidió una relajación de las metas de déficit para este ejercicio.

Según confirmaron fuentes del Ministerio de Hacienda, el pago no irá incluido en la nómina, sino que se hará un abono aparte, aunque no han especificado si se cobrará de una vez todo el porcentaje pendiente, de casi el 50 %. Las mismas fuentes explicaron que este pago no implicará un gasto adicional para el Estado, puesto que ya estaba comprometido en los Presupuestos para 2016. Eso sí, no ayudará al cumplimiento del déficit marcado por Bruselas.

El Gobierno también anunció que la previsión de la tasa de paro para este año sube dos décimas y se sitúa en el 19,9 % de la población activa, mientras que para 2017 sube tres décimas, hasta el 17,9 %. La deuda pública, el Gobierno cree que terminará el presente ejercicio en un 99,1 % del PIB, nueve décimas más de lo previsto hasta ahora, y bajará en 2017 al 99 %, frente al 96,1 % calculado hasta la fecha.

CC OO y UGT se felicitaron de la devolución a los funcionarios de casi el 50% de la paga extra, pero acusaron al Gobierno de haber iniciado la campaña electoral con esta medida, que les comunicó telefónicamente. CC OO criticó «duramente» la forma de proceder de Hacienda, y le acusó de «pisotear» la negociación colectiva a la que tienen derecho los empleados públicos. «Y además, decreta el inicio de la campaña electoral, aunque tenemos serias dudas de que alguien les vaya a dar su voto porque les devuelven lo que les había quitado», subrayó.

Sin noticias de la UE

Por su parte, el vicepresidente de la Comisión Europea para el Euro y el Diálogo Social, Valdis Dombrovskis, subrayó que no se ha tomado «ninguna decisión» sobre las medidas que se aplicarán después de que España haya vuelto a incumplir sus objetivos de reducción del déficit público.

Dombrovskis, que dijo haber visto las informaciones en la prensa que apuntan a que España habría pactado con Bruselas obtener una nueva prórroga de uno o dos años para colocar su desvío por debajo del 3 % del PIB, indicó que hasta mayo no se tomará ninguna decisión y negó la mayor.