La empresa valenciana de ciberseguridad S2 Grupo, dedicada a proteger de ciberataques a compañías y administraciones públicas, sigue creciendo en ventas y clientes al calor de la cada vez mayor conciencia sobre los peligros que acechan en la nueva economía hiperconectada.
Las últimas noticias sobre el asalto de piratas informáticos a la información privada del Partido Demócrata en víspera de las elecciones americanas; el hackeo de miles de cuentas del portal Yahoo o las filtraciones masivas de información sensible de bancos o bufetes de abogados han puesto en guardia a todo aquel que tenga alguna información sensible que proteger.
Según señala la propia empresa, la firma cerró 2016 por primera vez por encima de los diez millones de euros, concretamente, con 10,5 millones en ventas, un 14% más que el año anterior. Desde su puesta en marcha en 2004, la empresa que lideran Miguel Ángel Juan y José Rosell mantiene una curva de crecimiento en ventas y personal que hoy le permite tener 225 empleados. Sólo en 2016 ha incorporado a 30 personas a su plantilla, jóvenes informáticos e ingenieros casi siempre formados por la propia compañía a través su programa de formación interno «Enigma».
El crecimiento del negocio lo vinculan principalmente a la incorporación en los últimos meses de organismos públicos de primer nivel a su cartera de clientes. Aunque guardan confidencialidad con la mayoría de clientes, S2 Grupo se ha convertido en proveedor de ministerios, gobiernos autonómicos (entre ellos la Generalitat valenciana) y hasta la Administración General del Estado. También en el extranjero, donde se encargan de la protección digital del Senado de México.
En el ámbito de la empresa privada, S2 Grupo ha colocado en su cartera de clientes a varias empresas del Ibex 35, esto es, las principales empresas cotizadas del país, como los grandes bancos, o empresas energéticas, especialmente sensibles a las amenazas por su impacto en la población.
En cuanto a los retos para este año 2017, los dirigentes de la compañía han puesto Latinoamérica como principal mercado de expansión. Allí, en Colombia y México tienen sendas oficinas abiertas y la intención es consolidar su presencia allí con la puesta en marcha de un centro de respuesta ante las incidencias de seguridad de la información (CERT) en Colombia. La previsión es alcanzar una facturación de dos millones en el mercado latinoamericano este año.
Junto a la facturación de 10,5 millones (una cifra considerable en una empresa de servicios), destaca la inversión durante el pasado ejercicio de 1,5 millones en proyectos de I+D+i. La firma ha desarrollado recientemente proyectos junto a organismos como el CNI. El core business de la firma es también la creación de productos para detectar las amenazas, esto es, la entrada de piratas en los sistemas de la compañía.
La proyección de la empresa ha hecho incluso que recientemente Valencia haya sido escenario de un encuentro internacional de ciberseguridad, con presencia de especialistas de decenas de países y de grandes compañías de todo el mundo para intercambiar experiencias.
Según señalan desde la compañía, todas las empresas, grandes y también pymes, están expuestas al posible robo de pantentes, ofertas de licitación y todo tipo de información sensible. Aunque la sensibilidad de las corporaciones hacia este problema está creciendo, aún falta inversión, concluyen.
