La revolución de la industria 4.0 avanza imparable con la mejora de las redes de datos y su desarrollo se va a acelerar con el despliegue de las redes de 5G. Como toda revolución provocará la caída de las empresas que no sepan adaptarse. «La digitalización no es una opción. Es una necesidad para todas las empresas. La industria 4.0 es la cuarta revolución industrial y va a suponer una transformación completa como ya hemos visto con la disrupción digital y la caída de empresas como Kodak, Blockbuster». Así destacaba la importancia de la renovación permanente el director general de Telefónica en la Comunitat Valenciana, Cataluña, Islas Baleares y Región de Murcia, Kim Faura, que participó en un encuentro organizado por Levante-EMV y Telefónica, presentado por el director general de contenidos de Editorial Prensa Ibérica en València, Cruz Sierra, bajo el título Digitalización e industria 4.0.

Ingenieros industriales y de telecomunicaciones, empresarios, ejecutivos y emprendedores debatieron sobre los retos que plantea la industria 4.0. En la mesa redonda intervinieron Narcís Cardona, director del Instituto de Telecomunicaciones y Aplicaciones Multimedia (Iteam); David Tronchoni, CEO en Edinn; y César Taboas, responsable de I+D en Grupo Royo. La mesa la moderó Cruz Sierra y la jornada la clausuró Júlia Company, directora del Institut Valencià de Competitivitat Empresarial (Ivace).

Kim Faura explicó que Telefónica se ha reinventado para poder hacer frente con garantías a la transformación del consumo y lo puso como ejemplo de lo que deben hacer las empresas ante el reto de la transformación de la industria 4.0. «No hay ningún sector inmune a esta disrupción. La primera revolución fue la máquina de vapor, la segunda la electricidad y las cadenas de montaje como la del Ford T, la tercera la automatización y la cuarta tiene que ver con el aprovechamiento de los datos y la sensorización de las máquinas. El diseño de los productos se alimenta de procesos colaborativos y el big data para fabricar productos personalizados», señaló Faura.

El directivo de Telefónica advirtió a los empresarios que acudieron a la conferencia de que «la tecnología va por delante de todo. Esto provoca problemas con la formación porque el 65 % de las profesiones del futuro todavía no existe. Ahora la dificultad es qué les enseñamos a los niños».

César Taboas incidió en que la industria 4.0 «ha venido para mejorar el estado de bienestar». El responsable de I+D en Grupo Royo aseguró que la gran palanca de la empresas para superar la crisis fue su apuesta por la innovación. «Nosotros invertimos el 2,6 % del gasto corriente en I+D. En Alemania y Francia vemos que hay una apuesta clarísima por la industria 4.0». Taboas se mostró convencido de que la tecnología no va a acabar con los puestos de trabajo, pero sí creará «un empleo diferente».

Narcís Cardona señaló que el 5G va a aportar en la industria 4.0 una mejora en la rapidez con la que se transmite la información (latencia), que es clave por ejemplo para poder realizar una intervención quirúrgica a distancia. El director de Iteam sostuvo que tiene «todo el sentido que la investigación se realice en las universidades. El conocimiento que generamos lo trasladamos a los planes de estudios».

David Tronchoni reconoció que en la «industria 4.0 no todo es rentable. La gestión en tiempo real sí que es muy rentable. No es necesario monitorizar toda la fábrica. Hay que centrarse en las herramientas fundamentales».

Júlia Company aseguró que implantar la industria 4.0 es «factible, viable y rentable económicamente». La directora general del Ivace lamentó que la mayoría de las pymes no son conscientes de los beneficios que implica. «Los mercados giran a una velocidad de vértigo y en nuestra hoja de ruta está conseguir la digitalización del tejido empresarial valenciano», sentenció.