La Sociedad de Garantía Recíproca (SGR) de la Comunitat Valenciana pretende aprovechar el auge actual de la demanda en el mercado inmobiliario de las oficinas para cumplir uno de los ejes de su plan estratégico: la venta de sus sedes en la autonomía. El objetivo, según fuentes oficiales de la conselleria de Hacienda, no es otro que generar ingresos extraordinarios para reducir su deuda con las entidades financieras. Desde la firma avalista añaden que la venta busca también lograr un cambio en su estructura comercial mediante nuevas oficinas más próximas al concepto de las bancarias.
La sede central de la SGR, ubicada en la calle Amadeo de Saboya de València, ocupa una superficie de 1.396 metros cuadrados en una primera planta e incluye ocho plazas de aparcamiento en el inmueble donde está ubicada. El proceso de venta se realiza mediante la remisión a una notaría de las ofertas interesadas que, si no alcanzan los 2,85 millones de euros, podrán ser desestimadas. El proceso se inicia el 27 de febrero y finaliza el 12 de marzo. Antes del 5 de abril, la SGR dará a conocer la propuesta aceptada por ella.
La venta de la sede alicantina, según fuentes de la sociedad, se encuentra en una fase muy avanzada y podría darse a conocer en los próximos días, mientras que la de Castelló «va más lenta». En ninguno de los dos casos la SGR ha querido hacer pública la cantidad mínima económica para aceptar la oferta.
La firma avalista pretende que sus futuras oficinas sean «más funcionales y cumplan mejor con el cariz más comercial» que el plan estratégico ha diseñado para la SGR. Se trata, por tanto, de establecimientos similares a las sucursales bancarias para cumplir una misión de cercanía con el cliente y, sobre todo, donde sea más factible acelerar la concesión de avales a empresas, que es la principal misión de la sociedad. Las mencionadas fuentes explicaron que uno de los objetivos es que la nueva sede central se ubique en las proximidades del Instituto Valenciano de Finanzas (IVF), que se encuentra situado en la plaza de Nápoles y Sicilia de la capital autonómica. El director general del IVF, Manuel Illueca, es el presidente de la SGR. Respecto a Alicante, la entidad baraja varias ubicaciones pero aún no está cerrada la definitiva. En Castelló, también en este caso, la operación va más al ralentí.
Las fuentes de la SGR consultadas insistieron en que «no se van a malvender» las sedes porque «ahora hay buenas ofertas y mucho interés». Desde la conselleria de Hacienda insistieron en que los ingresos que se obtengan con las citadas operaciones irán destinadas a saldar parcialmente la deuda con la banca. En estos momentos, el saldo acreedor asciende a 83 millones en préstamos seniors y 40, en subordinados. El endeudamiento rondó los 400 millones de euros, amortizado en parte con fondos de la Generalitat, según los datos facilitados por la propia entidad.
