La campaña electoral comenzó ayer a las doce de la noche con la pegada de carteles, una tradición venida a menos, pero que los partidos mantienen en su agenda política. Si ya en las autonómicas, los actos de arranque de campaña han ido perdiendo fuelle, en estas generales el pistoletazo de salida es aún más descafeinado. Y es que todos los partidos que aspiran a sentarse en las Cortes se encuentran a la espera de que aterricen en la C. Valenciana las estrellas de Madrid. Todos los presidenciables pasarán por la CV, donde están en juego 32 escaños

En unas elecciones tan abiertas como estas, la campaña puede ser decisiva, pero se juega más en los platós y con las primeras espadas.

Con todo, PPCV, PSPV, Compromís-Podem, Ciudadanos y Esquerra Unida cumplieron anoche el programa en varios actos con sus cabezas de cartel. El PP arrancó con una defensa de Rajoy; los emergentes con el propósito de romper el bipartidismo y el PSPV haciendo valer la Presidencia de la Generalitat para reivindicar la financiación.