El exsecretario general del PSOE Pedro Sánchez ha defendido este sábado un partido "autónomo y de izquierdas" frente a una Gestora que lo deja "en tierra de nadie" y ha animado a los militantes a resolver así la "encrucijada" en que se encuentra este partido. Ha reunido a un millar de afiliados y simpatizantes en el Centro Cívico Delicias de Zaragoza, que se ha quedado pequeño.

Precedido en el estrado por la diputada del PSOE al Congreso por Zaragoza, Susana Sumelzo, Sánchez ha aseverado que en España "solo hay dos opciones: el cambio o la derecha" y ha dejado claro que él, aspirante a la Secretaría General en las primarias internas, no renuncia a que el PSOE sea "la fuerza del cambio" en España.

"Todos queremos la unidad" en el PSOE, ha continuado, añadiendo que "la llave la tienen los militantes" y que estos decidirán en las elecciones primarias y el congreso del próximo mes de junio. "No somos un partido de centro con sensibilidad social", ha aseverado.

Sánchez ha defendido valores de la izquierda, como el feminismo, el laicismo, el ecologismo y ha apelado en su intervención a las personas mayores que mantienen los hogares con sus pensiones y los parados de larga duración. Ha apostado por configurar una alianza progresista en Europa contra las políticas del nuevo presidente norteamericano, Donald Trump.