«Festes de València» ya existe como marca de la ciudad y ya ha suscitado la previsible división de opiniones. A algunos les encanta y a otros no. Es la idea de Carlos Corredera, un diseñador que, en los últimos años, se ha caracterizado por poner en valor todo cuanto ha propuesto, por ejemplo, en las fallas. Ahora, este nuevo imagotipo estará en todos los ámbitos de la fiesta, desde los papeles oficiales a cualquier objeto de mercadotecnia. Pero no es más que el primer paso en un programa de renovación de las imágenes relacionadas con la fiesta. Ayer, el concejal Pere Fuset reconoció que se está trabajando para modernizar el emblema de la Junta Central Fallera, el tradicional labrador que está haciendo sonar una caracola y que compone el estandarte histórico del organismo rector de la fiesta. Fuset aseguró que «aún no sabemos quien ni cómo se hará, pero la idea es que estuviera antes de fallas». La JCF tiene un logotipo moderno, pero que va a ser aparcado «porque creo que ha tenido muchas críticas. Es una imagen que no acaba de enamorar. Y al tradicional lo que hay que hacer es adecuarlo a los nuevos tiempos. Aún no sé quien será el "cirujano"».

La nueva imagen ideada por Carlos Corredera desterrará, a su vez, el logotipo vigente «Fem Festa al Cap i Casal» de la concejalía y quedaría también por resolver la marca «Fallas de Valencia», que actualmente está representada por un logo que aúna la estructura de un monumento fallero y las llamas que lo consumen. «Primero vamos a escuchar a los profesionales, pero tenemos que trabajar desde el ayuntamiento con Turismo de la Generalitat Valenciana para diseñar una estrategia conjunta. No será algo inmediato, pero lo que no debemos es de caer en el error de ir cada uno por su lado».

«Festes de València» es un logotipo que trata de aunar todos los aspectos de la fiesta. Incluye una letra "f" como elemento principal, rematado por una voluta que recuerda elementos que se pueden ver en las Rocas del Corpus. A la izquierda, la letra se convierte en la campana de una trompeta (la música) que termina en un semicírculo que puede ser igual un reloj que anuncia las horas de la fiesta, una flor, una carcasa o un palmito.