Joan Blanch, uno de los cinco miembros del jurado que ha elegido el proyecto de Manolo García denominado «València, Ca la Trava» para la falla grande municipal, lamentó ayer la actitud «absolutista» de la concejala de Ciudadanos en el Ayuntamiento de Valencia, Amparo Picó, que calificó el monumento de «surrealista» y «un huevo sin sal».

«Entendería estas declaraciones si la señora Picó las hubiera realizado en su casa o el ámbito privado, pero en el ámbito político manifiestan una actitud absolutista, con consideraciones exiguas y con poca consistencia desde el punto de vista artístico», señaló el último ganador de la falla infantil, que plantó en Na Jordana.

Para Blanch, las declaraciones de la concejala Amparo Picó, solo perseguían «la conflictividad» y lamentó que ponga en duda «la capacidad del jurado». «Lo dijo después de una reflexión moderada y con una sonrisa en la cara, pero la señora Picó no ha estado nada acertada con esas declaraciones. No puede poner en duda así al jurado, pues yo me encontré con cinco personas muy capacitadas y preparadas para tomar una decisión que además consideramos que es la mejor desde todos los puntos de vista analizados», consideró Joan Blanch.

El miembro del jurado considera que «València, Ca la Trava» «refleja el espíritu crítico, satírico, irónico tan valenciano» que se había perdido en la falla municipal. «Creo que el rumbo en los últimos años se había perdido o desviado y este año esta falla ha conseguido llevar muy lejos el espíritu irónico de nuestras fiestas. Que los valencianos seamos capaces de reírnos de los que hemos hecho y de lo que no se ha hecho creo que es un ejercicio muy bueno», asegura.

Joan Blanch insiste que el monumento presentado por Manolo García cumple todos los requisitos exigidos por el jurado para merecer ser plantada en la plaza del Ayuntamiento y además tenía «un gran desarrollo tridimensional y es un proyecto muy interactivo».

El concejal de Cultura Festiva del Ayuntamiento de Valencia, Pere Fuset, también mostró ayer su solidaridad al señalar: «Si se ha optado por un jurado sin voto político es precisamente para que sea el espíritu artístico y fallero el que predomine sobre cualquier criterio político como el que ahora la oposición expresa con su crítica a los artistas y sus proyectos». Fuset calificaba de «inadmisible» que sean «un político imputado y otra política solo preocupada por salir en la foto quienes pretendan cuestionar la profesionalidad, la libertad y la calidad de artistas falleros».»Alguien le tendrá que explicar a Crespo y a Picó que atacar a los artistas falleros o a los jurados designados por entidades como el Gremi, la Interagrupación, les Falles d'Ingeni i Gràcia o los departamentos artísticos de las universidades públicas solo demuestra una falta de respeto por la libertad artística en la fiesta fallera», remarcaba.