La comisión del Mercado Central ha tildado de «barbaridad jurídica» que la empresa Bacha SA haya tratado de embargar bienes de los presidentes de la comisión en el caso de que ésta, por sus propios medios, no pueda satisfacer los 56.485 euros que el Juzgado de Primera Instancia le reclama cautelarmente hasta que se solvente el recurso al pleito que sostienen ambas partes por un presunto incumplimiento de contrato de cesión de derechos de imagen.

Es uno de los puntos del escrito de réplica de la comisión tras la disposición del juzgado, que publicó ayer Levante-EMV y que incide en la responsabilidad civil de los presidentes en situaciones como ésta. «El demandante solicitó el embargo sobre bienes de los Presidentes de la Falla, lo que es una barbaridad jurídica pues no han sido parte ni demandados en este proceso civil. El Juzgado no contestó a la solicitud y, habiendo sido declarada nula esa fase, si el insiste en esa pretensión deberá volver a solicitarlo».

Y el argumento que sostienen para entender que esa pretension no tiene recorrido es que el demandante „la sociedad, propiedad de Claudio Chaqués„ tambien solicitó el embargo «de las cuotas de los miembros de la Falla, pero el Juzgado ha denegado la solicitud, obviamente, por no ser éstos parte demandada en el proceso. Lo que será también de aplicación en el caso de que insista en la petición contra los presidentes».

De momento, la comisión deberá abonar el dinero, lo que no quiere decir que lo pierda definitivamente, puesto que si prospera su recurso, se recuperaría y «el demandante quedará obligado a devolver todo y a indemnizar por los daños y perjuicios que hubiera causado con la ejecución».

Así mismo, la comisión que presiden Carmen de Rosa y Federico Bixquert desdicen a los representantes de Chaqués, quienes aseguraban que la comisión no se ha querido sentar a negociar. «La Falla ha intentado formalizar nuevas reuniones mediante conocidos comunes e Entidades de relevancia y la respuesta de los señores Chaqués ha sido siempre negativa», acabando con una crítica: «La única intención y objetivo de Claudio Chaqués ha sido y es, hacer el máximo daño y sin ningún tipo de escrúpulo a nuestra falla, ya que le fue imposible controlarla. De una rencilla personal, que no supo resolver, trasladó el problema a toda una comisión sin importarle lo más mínimo la trascendencia de sus hechos».