Anaís Menguzzato realizaba ayer una primera valoración «satisfactoria» de cómo han ido estas Fallas en materia de seguridad, tras la puesta en marcha de nuevas medidas antiavalancha. A falta de recopilar todos los datos y poder realizar un balance contrastado y objetivo, la concejala de Protección Ciudadana apuntaba que este año el vaciado de las calles tras mascletaes y castillos «ha sido más rapido que en años anteriores». «Las vías de evacuación han funcionado, la gente no se quedaba parada hasta una hora como sucedía antes a pesar de que la afluencia de vecinos y visitantes ha sido enorme otra vez», argumentaba la edila socialista.

Menguzzato incidía en que lanoche del sábado al domingo volvió a ser complicada por las aglomeraciones y la confluencia de verbenas con los castillos, pero dentro de la normalidad. «No ha sido como el año pasado, ni mucho menos», reconocía, para acto seguido puntualizar: «Dentro de toda la dificultad que entrañan operativos de seguridad como estos, la última noche ha sido algo más tranquila».

Menguzzato, aunque consciente de que las nuevas medidas de seguridad, como las vías de evacuación o la retirada de las terrazas a mediodía han generado polémica con vecinos y comerciantes, defiende que pese a las críticas «han valido la pena». «Sé que hay sectores entre los que ha generado rechazo, pero se ha visto que toda seguridad es poca y se ha sido flexible con comercios y tiendas», explicaba. La responsable de Policía Local y Bomberos echaba la vista atrás para recordar cuando se colocaron vallas de seguridad por primera vez en las mascletaes para evitar posibles accidentes pirotécnicos. «Al prinicipio costó y ahora todo el mundo lo ve como algo normal», razonaba.