La Clavaría del Santísimo Cristo de los Afligidos de Quart de Poblet y la del Cristo de la Fe de Mislata se han hermanado tras años de colaboración y ayuda mutua. Así lo anunció ayer el presidente del colectivo quartero, Felipe González, quien indicó que a partir de octubre se procederá a la legalización administrativa de lo que, de momento, es sólo una fraternal unión interna.
«El contacto era muy estrecho desde hace algún tiempo —apuntó González—, aunque últimamente es cada vez mayor porque los encuentros nos sirven para intercambias experiencias y compartir ideas». De hecho, en breve, la clavaría de Quart de Poblet piensa poner en marcha algunas de las propuestas que le ha aportado la agrupación mislatera a la hora de «atraer gente joven» al colectivo. «Ellos han sabido captar la atención de la juventud, que es la que debe continuar con la actividad de las clavarías y mantener así vivas las tradiciones», aseguró.
No obstante, además de esta perspectiva, la ayuda mutua que se prestan ha tenido siempre mucho peso. «Colaboramos en cuanto tenemos oportunidad», destacó González. La última vez hace apenas unos días, cuando los que Quart acudieron a Mislata para dejarles sus andas y trasladar al Cristo de la Fe con motivo del 75º aniversario de la clavaría. En unos días, los mislateros les devolverán la visita, ya que el lunes tienen previsto acudir a Quart, que ya estará en fiestas, para portar con ellos a su Cristo y recibir una placa conmemorativa.
Ambas asociaciones entraron en contacto por las relaciones personales que mantenían algunos de sus miembros y, a partir de ahí, todo fue rodado. «En Mislata hay dos o tres compañeros de trabajo —cuenta el responsable del Cristo de los Afligidos de Quart— y, además, el florista que nos decora las andas y la iglesia en nuestra fiesta es el presidente de la Clavaría del Cristo de la Fe de Mislata, José Montañana». En ambos casos, las clavarías surgieron como grupos de quintos o solteros que, luego, derivaron en agrupaciones culturales ante la falta de participantes.
