El gobierno de Torrent anunció ayer que ya trabaja en la elaboración de unos novedosos presupuestos por objetivos que «permitirán supervisar mejor el empleo del dinero público, su grado de ejecución y su nivel de satisfacción», explicó el regidor de Hacienda, Andrés Campos. El primer departamento en trabajar de esta forma será el de Modernización pero la intención es que en breve le sigan el resto de áreas municipales y, más adelante, se sumen también «mecanismos de participación ciudadana a la hora de confeccionar el presupuesto».

Para elaborar la previsión económica de cada año, el equipo de gobierno del PSPV contará con «una comisión técnica mixta» que será la encargada de cuantificar cada partida presupuestaria con atención a unos criterios objetivos. «Se trata de establecer unas metas claras en cada ejercicio y cada área municipal —detalló el edil y confirmó el alcalde, Jesús Ros— para que los vecinos sepan en qué se va a gastar el ayuntamiento su dinero y, así, les sea también muy fácil comprobar si se ha cumplido lo que se prometía o no».

El único departamento municipal que exigirá mayor flexibilidad y en el que probablemente no se podrán señalar unos fines claros es el de Bienestar Social. «En lo que se refiere a la atención de las personas, lo único que podemos hacer es elaborar una previsión en función del gasto del ejercicio anterior, puesto que nadie sabe cuántos vecinos van a reclamar ayuda ni qué necesidades habrá que cubrir en cada caso», matizó Ros.

El resto de áreas trabajarán, antes o después, en pro de la consecución de unos objetivos que, por lo prontó, se prevé que reduzcan de manera significativa «las modificaciones de créditos» y «el gran cajón desastre del que se valen muchos» ejecutivos para gobernar a su antojo.

«Estudio de marrones»

El mandatario también anunció ayer, durante su comparecencia quincenal ante los medios de comunicación, que el próximo mes de noviembre se «aprobará la constitución de la comisión que debe analizar los convenios, contratos y adjudicaciones» realizados por el ayuntamiento en los últimos años. La intención es que dicha comisión supervise cada uno de estos actos para comprobar «si eran necesarios» y si se ajustan a derecho, porque «si algo define los primeros cien días del nuevo gobierno de Torrent es el estudio de los numerosos marrones que dejó al anterior equipo del PP», matizó. De momento, el ejecutivo local se encuentra en la fase de decidir qué personas integrarán la comisión, así como la metodología que seguirá.

Otro tema que ayer saltó a la palestra fue el antiguo mercado, donde el anterior gobierno popular había proyectado instalar una escuela de hostelería y una superficie comercial. Sin embargo, según Jesús Ros, de las conversaciones que supuestamente mantenía el concejal del PP en este sentido, «no hay ni rastro en el expediente», lo que evidencia «que no existían». Asimismo, subrayó que su equipo sí mantiene contactos en la actualidad encaminados a hacer realidad esas instalaciones.

Sobre la recepción de las obras del mercado por parte del Consell, de las que el PP aseguró hace unos días que estaban recibidas desde hace tiempo, Andrés Campos desmintió tal información y reveló que, de hecho, en el expediente «la propia Generalitat dice que seguramente podría hacerlo a finales de octubre».