El gobierno tripartito de Xirivella ha aprobado congelar el Impuesto de Bienes Inmuebles (IBI) y ha introducido exenciones en función de circunstancias sociales (un 75%), por fomento del empleo (un 60%), y por circunstancias culturales e histórico artísticas (un 50%). Además se congela la tasa de basura para las viviendas y para aquellos epígrafes más bajos. Para favorecer la instalación de nuevas actividades que revitalicen el comercio y el empleo se rebaja un 46,6% las tasas para abrir un nuevo negocio.

Los objetivos de la nueva política fiscal del gobierno de Xirivella son «mantener el equilibrio presupuestario, anteponer las personas a los números, hacer los servicios más asequibles y favorecer la creación de nuevos comercios».

Según el alcalde, Michel Montaner, «son unas ordenanzas responsables» que «mantendrán el equilibro económico del Ayuntamiento, pero que ayudarán a quién más lo necesita». Las ordenanzas incumplen el Plan económico aprobado por el PP como reflejan los técnicos en su informe, según reconoce el alcalde. «Según ese plan, deberíamos subir todos los impuestos y no poner bonificaciones», añade.

La nueva ordenanza de la Ayuda a Domicilio amplía el tramo en el que se está exento de pago hasta los 799 euros, que en este momento estaba en 533 euros. Además, las familias que cobran menos del Iprem tendrán una bonificación del 100 por cien en el recibo de la recogida de basura.

Por otro lado, aquellas mujeres víctimas de la violencia que dependan económicamente de su maltratador no tendrán que pagar los cursos de atención psicológica a los que asisten.

Las ordenanzas incluyen la exención por la uso esporádico de un local municipal. Las ferias y mercados temáticos estarán exentos de pago durante dos años. Las tasas por uso de instalaciones deportivas también bajan y, por último, los niños no pagarán por la campaña «Anem al Teatre».