El Ayuntamiento de Catarroja ha iniciado una negociación con la empresa Asesores Locales Consultoría SA para reducir el número de fotorrojos, el sistema que graba y sanciona a los conductores que se saltan los semáforos en rojo y que han causado un profundo malestar entre los residentes del municipio.
La idea del consistorio que dirige el alcalde Jesús Monzó, es, ante la imposibilidad de rescindir el contrato con la adjudicataria, bajar de seis a dos los sistemas sancionadores instalados en Catarroja. El argumento del equipo de gobierno local es equiparar los fotorrojos al número de habitantes de la población, «siguiendo el ejemplo del resto de municipios adheridos al contrato», señalan en un informe.
Fuentes municipales explicaron que la negociación con la empresa «está abierta y hemos trasladado nuestra propuesta a la empresa. Estamos negociando», detallan. Cabe reseñar que Catarroja es la localidad, de las cinco adheridas al contrato, con más fotorrojos instalados.
Además de entablar contactos con la adjudicataria, el ayuntamiento ha solicitado también a la Mancomunitat de l'Horta Sud, como parte firmante del contrato con la empresa contratista, su apoyo para que medie y pueda alcanzarse una solución que beneficie a ambas partes.
Más de 11.000 denuncias
La instalación del sistema de fotorrojos en Catarroja ha dejado un balance de más de 11.000 denuncias en solo cinco meses de funcionamiento. Las sanciones, de 200 euros y la retirada de cuatro puntos del carné, han escocido mucho entre los afectados.
Por este motivo, una de las primeras soluciones que adoptó el equipo de gobierno municipal fue aumentar la fase de ámbar hasta los cuatro segundos con el fin de reducir en parte la sangría de multas y calmar el rechazo vecinal de una medida aprobada e implantada en la anterior legislatura comandada por el PP.
