La concejala de Infraestructuras de Paterna, Nuria Campos, defendió ayer la labor que está realizando el equipo técnico de su área con el objetivo de encontrar alternativas provisionales para canalizar las aguas del Barranc del Rubio, ante la imposibilidad de realizar el proyecto definitivo valorado en alrededor de once millones de euros.

La regidora contestaba así a los populares paterneros que acusaron al bipartido PSOE-Compromís de renunciar al proyecto «después de comprometerse a ejecutar su canalización» y «marginando a los vecinos» con unos «trabajos menores que no van a evitar nuevas inundaciones en caso de lluvias torrenciales».

Campos explicó que hace un año se constituyó una mesa de trabajo con los afectados para tratar de encontrar una solución provisional para drenar las lluvias y evitar inundaciones. Para ello se dispone de una partida de 600.000 euros - de los que 100.000 los aporta la Diputación-. «Por el momento se está en fase de estudio para encontrar la mejor solución. Ya se han probado dos medidas que no han dado resultado», detalló Campos, que recalcó que «en cada reunión -la última celebrada antes de las vacaciones de Semana Santa- se aborda una posible medida, se debate, se prueba y lleva su proceso», dijo. Además, la regidora incidió en que la alternativa que finalmente se acometa «debe servir de cara al futuro».

En cambio, el PP ha sido muy crítico con esta solución intermedia revelando que los vecinos «afirman sentirse engañados por el gobierno del Batán» y «han mostrado al Partido Popular su malestar por el hecho de que el gobierno PSOE-Compromís haya manifestado su renuncia a ejecutar la canalización del Barranco del Rubio, con lo que los vecinos de esta zona de La Canyada seguirán sufriendo inundaciones en sus casas cuando se produzcan lluvias torrenciales». Además, los populares señalan que la actuación municipal «ha logrado dividir a los propios vecinos de la zona, solucionando sólo los problemas de algunos mediante parches en lugar de ofrecer una solución integral para el conjunto» y «lamentan que el alcalde no da la cara y ni aparece por la Junta de Barrio ni se reúne con los afectados», critican desde el PP.

La portavoz popular, María Villajos, lamenta que mientras los populares «recurrimos a financiación local, autonómica e incluso nacional para prevenir problemas de pluviales en casco urbano y La Canyada, el gobierno del Batà se limita a anunciar que no hay dinero». Para la representante del PP en la Mesa de Trabajo del Barranco del Rubio, Marisa Ferre, "la falta de liquidez no puede ser una excusa cuando en el próximo pleno se va a aprobación la liquidación del presupuesto de 2016 con un superávit de 14 millones de euros».