La aspiración de los descendientes de Vicent Miquel Carceller de que tenga un reconocimiento en el espacio donde pasó gran parte de su vida, la Canyada de Paterna, quedará finalmente cumplida. El pleno aprobó esta semana bautizar el centro social de la Canyada con su nombre, en reconocimiento a que vivió en este núcleo y además su casa, con una llamativa decoración, fue lugar de encuentro de la intelectualidad y polo de atracción de visitantes.
Carceller, que fue editor y director de la revista satírica La Traca, donde hizo gala de su ideología valencianista y anticlerical, acabó siendo detenido tras la Guerra Civil y fusilado en Paterna, junto al dibujante Bluff. La tumba de Carceller está en un lugar destacado en el cementerio, ya que su familia pudo costear una lápida.
Fueron los familiares de Carceller junto al portavoz del Grupo para la Recuperación de la Memoria Histórica, Matías Alonso, quienes pidieron un reconocimiento para este editor, en una reunión con el alcalde, Juan Antonio Sagredo.
La propuesta inicial fue la que se ha aprobado. En el proceso también Compromís propuso que se le diera una calle, aunque fue desestimado porque no existe tradición de nombres en las vías de la Canyada sino que son números. Además, se valoró dar su nombre al instituto de secundaria. Finalmente, se ha vuelto a la idea inicial de recordar su memoria en el centro social porque allí está la biblioteca y es uno de los servicios donde confluyen personas de todas las edades.
Alonso ha elogiado la iniciativa. «Paterna se ha adelantado a València, donde hay también una petición en ese sentido. Aunque gobiernan los mismos partidos, en Paterna ha tenido más sensibilidad», valora.
