Desde hace cuatro años, un largo y farragoso proceso administrativo y judicial pretende erradicar lo que en su día fue una planta de valorización de residuos de contrucción, en la partida de La Contienda de Torrent.
Las instalaciones comenzaron a funcionar en 2010, sobre unos terrenos de regadío. En 2014, la conselleria de Infraestructuras declaró extinguida la licencia porque la mercantil que la gestionaba no había presentado comunicación previa a la apertura, pasado un plazo superior al establecido.
Un año despúes, el Seprona certificó que allí no había actividad alguna, pero sí los restos de lo que en su día funcionaba a pleno rendimiento: montañas de hasta 20 metros de altura de residuos mezclados y depositados sobre terreno natural sín ninguna medida de protección. El informe del departamento de la Guardi Civil apuntaba que en 2014 habían llegado 17.015,5 toneladas y solo habían salido 1.406,42.
A esto se sumaba que durante 2014 y 2015 se produjeron diversos incendios que alarmaron a las viviendas del entorno y a diversos núcleos de la ciudad, y provocaron la creación de la Plataforma. Uno de ellos se mantuvo sin extinguirse durante meses, lo que motivó que una de las personas afectadas acudiera a la UE.
Pero las órdenes de retirada y restauración de las parcelas que emitió la conselleria en 2015 toparon con la quiebra de la empresa, que lleva años en manos de una administradora concursal designada por el juzgado. De hecho, ante las primeras órdenes, la administradora alegó que pretendía poner en venta la actividad para que fuera el futuro comprador el que las asumiera, para lo que pidió que se revocara la extinción de la licencia. El pleno municipal no aprobó dar permiso para seguir con la actividad.
El pasado julio, la conselleria emitió una resolución en la que instaba a la administración concursal a dejar limpia la zona o le facturaría de forma subsidiaria los 2,4 millones de coste de retirar 73.000 metros cúbicos de basura.
En los últimos meses, se han realizado trabajos de desmantelmiento de la planta con la retirada toda la maquinaria así como la nave abierta donde depositaba parte de los residuos.
