El presidente rumano, Traian Basescu, pidió la pasada semana a su colega francés, Nicolás Sarkozy, que "tratase de parar" las expulsiones de gitanos de Francia a su país, en el transcurso del polémico Consejo Europeo de Bruselas, pero no recibió "una respuesta clara" del líder galo. "Sí, pedí al presidente francés que tratase de parar el proceso de expulsiones", reconoció ayer Basescu en un encuentro con la prensa extranjera en Rumanía. Subrayó que las repatriaciones son "soluciones momentáneas" y no a largo plazo puesto que los deportados volverán a emigrar en las mismas condiciones, al mismo país o a otro distinto.

Mientras tanto, el presidente permanente del Consejo Europeo, Herman Van Rompuy, y la mayor parte de los grupos del Parlamento Europeo, apoyaron ayer el examen por presunta discriminación contra Francia que lleva a cabo la Comisión Europea. "La prohibición en todas las formas de discriminación basada en nacionalidad o etnia es uno los principios fundadores de la UE", declaró rotundo ante la Eurocámara el presidente del Consejo.

Por otra parte, el Gobierno alemán negó ayer la comparación entre los gitanos kosovares, acogidos en Alemania como refugiados políticos durante la guerra de los Balcanes y que ahora están siendo enviados a su país de origen, y los gitanos rumanos y búlgaros que está expulsando Francia. La oposición socialdemócrata en Berlín no ha dudado en asociar ambos casos y sacar a la luz el programa alemán de repatriación al que el mandatario francés se refirió en el pasado Consejo Europeo de Bruselas y que fue desmentido tres veces en 24 horas por la canciller Angela Merkel.

Zapatero niega razones étnicas

El presidente del Gobierno español, José Luis Rodríguez Zapatero, ha señalado que las expulsiones de inmigrantes en situación irregular en Francia no se han realizado por su "origen étnico". En una entrevista concedida al diario "The Wall Street Journal" considera que "las medidas se adoptaron en el marco del estado de Derecho". "Los principios de integración deben funcionar, pero también debe respetarse el orden público en los campamentos en los suburbios".