El Levante UD está dispuesto a echar el resto para fichar un delantero centro de garantías. De hecho, el club azulgrana negocia el regreso de un viejo conocido, Arouna Koné (Costa de Marfil, 34 años), autor de 17 goles con la camiseta granota en la temporada 2011-2012, tal como ayer adelantó Superdeporte.

El costamarfileño milita ahora en las filas del Sivasspor turco, donde recaló este verano libre tras finalizar contrato con el Everton. Pese a sus 34 años y sus conocidos problemas de rodilla, Koné ha anotado esta temporada 8 goles y ve con buenos ojos volver a València, donde despegó futbolísticamente tras pasar un calvario en el Sevilla. El Levante UD negocia con el Sivasspor la vuelta del goleador en forma de cesión con una posible opción de compra.

Koné es la opción preferida por la dirección deportiva del club de Orriols, cuyo objetivo es contratar un futblista contrastado que conozca la Liga y por tanto pueda aportar rendimiento inmediato. En este sentido, existen otras opciones para reforzar la delantera.

El Levante UD no pierde de vista una posible operación para repescar a Felipe Caicedo (Ecuador, 29 años). El ahora jugador de la Lazio, que estuvo cerca de fichar por el Girona el pasado verano, ha disputado 16 partidos y ha firmado 4 goles.

El ecuatoriano marcó 13 tantos en la temporada 2010-2011 con el equipo levantinista y fue clave para el ascenso. Como en el caso de Koné, el Levante UD pretende un préstamo con opción a compra.

Otra de las alternativas que se manejan son las de Ulloa, exjugador del Almería y buen conocedor de la Liga española. El argentino, delantero del Leicester City, no están encontrando los minutos deseados y sus agentes ya tuvieron contactos con el Levante UD el pasado verano.

El club espera cerrar en breve el fichaje de alguno de estos delanteros, mientras Roger ya se entrena con normalidad en Buñol.

Puerta abierta a Langerak

Por otro lado, el Levante UD ha abierto la puerta de salida a Langerak. El meta australiano, fichado el pasado verano por 600.000 euros procedente del Stuttgart, tiene una oferta encima de la mesa del Nagoya Grampus, un conjunto japonés que está dispuesto a pagar por su traspaso. El club granota ha dado luz verde a la operación, que supondría un ingreso de más de 1,2 millones de euros en las arcas azulgranas. Ahora sólo falta el sí de Langerak, que no cuenta para Muñiz y sólo ha jugado un partido en lo que va de temporada.