Los propietarios de embarcaciones de recreo tendrán que pasar por caja para echarlas a la mar. En Dénia, ya no hay varaderos públicos. Y el último que quedaba en Xàbia, el de la cala de la Granadella, estará cerrado desde hoy. El ayuntamiento se ha visto abocado a clausurarlo dado que los remolques con las embarcaciones bloqueaban el complicado acceso a una cala que ahora está repleta de bañistas. Además, los barcos de recreo también entran en el canal del varadero y dificultan la salida de la zodiac de la Cruz Roja. El consistorio ha detectado que el colapso que genera, sobre todo los fines de semana, este embarcadero puede dificultar un rescate o la evacuación de algún bañista en ambulancia.

El varadero de la Granadella se utilizaba hasta hace unos meses de forma muy esporádica. Solo algunos pescadores de Xàbia y de El Poble Nou de Benitatxell botaban aquí sus barcas de pesca artesanal. Sin embargo, la conselleria de Infraestructuras privatizó el canal de la Fontana. La empresa concesionaria, Marina Nou Fontana, cerró el varadero público del canal en febrero. Ahora cobra 15 euros por botar una embarcación y vararla. Además, el antiguo varadero público del puerto de Xàbia también lleva años clausurado. Y la rampa de botadura del puerto de Dénia también se anuló hace un par de años al construirse el paseo del Raset. Al final, los propietarios de embarcaciones que no querían apoquinar tenían que ir a la Granadella.

El Ayuntamiento de Xàbia ha exigido a la conselleria de Infraestructuras que recupere la rampa pública del puerto. Pero hasta ahora no ha obtenido respuesta.