El Ayuntamiento de l'Atzúbia quiere salvar como sea la histórica Casa Abadía de Forna, que amenaza con venirse abajo. El consistorio realizará este viernes un pleno extraordinario para exigir a la Diputación de Alicante que retome de forma urgente la rehabilitación. Y el pleno se celebrará justo delante de este histórico inmueble.
La Diputación sí inició las obras para restaurar la Casa Abadía, que se construyó en el siglo XVIII, y convertirla en un centro cultural y social. Contrató a la empresa Symetra, que en septiembre de 2016 demolió el tejado y los tabiques interiores. Valló el edificio y apuntaló una pequeña cueva que está en el subsuelo y que antes era visitable. Ya no hizo más. En octubre, es decir, un mes después, paralizó los trabajos. Y ya no se ha movido una piedra. Las obras llevan 16 meses paradas.
Luego llegaron las lluvias torrenciales y los temporales de viento. Los muros apenas aguantan en pie. Ahora el ayuntamiento realizará un pleno extraordinario ante un edificio que es una ruina.
El consistorio de l´Atzúbia-Forna se ha cansado de reclamar sin ruido a la Diputación que reanude las obras. Ahora exigirá en la plaza de Forna una actuación urgente. Quiere que la reivindicación atruene en la calle.
La Casa Abadia conserva en sus fachadas tres valiosos relojes de sol (uno de ellos tiene una inscripción latina). El consistorio ya batalló lo suyo para que el Arzobispado de València le entregara el edificio. El proyecto de habilitarla como edificio municipal suplía la falta de dotaciones públicas en el núcleo de Forna.
Al paralizar las obras y amenazar el edificio con venirse abajo, los vecinos tampoco pueden utilizar la fuente de la plaza, que está colindante un inmueble histórico que ya no aguantará muchos temporales más.
