El pleno de Sagunt aprobó por unanimidad y sin discrepancias una declaración institucional de solidaridad con las víctimas de la talidomina, un fármaco patentado en España en 1954, que se siguió recentando contra náuseas y mareos en embarazadas hasta 1975, aunque más de una década antes se había comprobado que provocaba graves malformaciones en brazos y piernas a los niños. r.h. sagunt