«Es necesaria una implicación efectiva de todas las administraciones implicadas, tanto locales, provinciales como autonómicas, para sacar el patrimonio industrial saguntino del impasse en que se encuentra. Es urgente que los poderes públicos, con la participación democrática de la ciudadanía, acuerden los usos de este patrimonio, se determinen y planifiquen las actuaciones necesarias para su recuperación y que, de una vez por todas, se las dote de unas herramientas de gestión y financiación claras y sostenidas que permitan llevar a cabo su ejecución». Ésta es una de las conclusiones a las que llegaron los organizadores de la jornada sobre el patrimonio del Port.

También veían «ineludible» la elaboración de un Plan Director de Patrimonio industrial, concebido como una herramienta de trabajo a largo plazo, que funcione como documento de consenso político y ciudadano. Para ello creen necesario que su redacción se realice a partir de una comisión interdisciplinar de expertos, convocada con criterios de transparencia, en la que además queden fijados los cauces necesarios para la participación de la ciudadanía. Por ello, agregaban: «Dicho Plan deberá de analizar, entre otros asuntos, el futuro de la Fundación del Patrimonio Industrial del Port de Sagunt, que afecta al Horno Alto, el Museo Industrial y los archivos de AHM; un Plan Director de la Gerencia, en el que se determine su gestión y su protección; una alternativa para la Nau, que clarifique su titularidad y la gestión autonómica del espacio; así como la integración efectiva en el conjunto patrimonial industrial de todos los elementos diseminados que lo conforman como el Barrio Obrero, los grupos de vivienda social, o el pantalán», añadían.