El acuerdo que el lunes debe ratificarse entre Compromís, EU y ADN Morvedre por un lado y los socialistas por otro pondrá fin a más de siete años de inestabilidad municipal en el Ayuntamiento de Sagunt, cuya peor consecuencia ha sido no tener presupuesto desde 2009. Precisamente la necesidad de las cuentas ha sido el factor que ha propiciado este acercamiento, negociado desde hace meses, pero que había quedado estancado por cuestiones como la cantidad de liberados o la composición de la junta de gobierno.
A falta de precisar algunas cuestiones, como el reparto de delegaciones del que sólo ha trascendido que los socialistas se harán cargo de Turismo y Deportes, entre otras, la cuestión presupuestaria es la más avanzada, hasta el punto que se mantienen los planes de llevarla a pleno el próximo lunes. La concejala de Hacienda, Teresa Garcia, reconocía a Levante-EMV que «estamos estudiando las propuestas que el PSPV nos ha presentado, pero todas se puedan incorporar sin tocar prácticamente nada».
Entre estas aportaciones a las cuentas del próximo año se encuentran la elaboración de un plan social para Sagunt, el aumento en 300.000 euros de la partida de la SAG para limpieza viaria, la inclusión de 120.000 euros para habilitar un cementerio islámico, el incremento en 160.000 euros de la partida de Policía Local para aumentar la plantilla en 15 agentes, 50.000 euros más para el desarrollo del corredor verde entre Sagunt y el Port, 40.000 euros para un plan de marketing turístico del municipio, así como otros añadidos en sanidad, vivienda, repavimentación y la mejora de accesos en el polígono Horno Alto, antiguo Ingruinsa.
«Valoramos muy positivamente estas enmiendas que desbloquean una anomalía histórica en cuanto a los presupuestos», aseguraba Garcia. En cuanto al pacto de gobierno, la nacionalista señala que «esta ciudad eligió en 2015 una mayoría de progreso, que ahora esperemos que se conforme para dar la estabilidad necesaria al ayuntamiento para afrontar los retos que tenemos por delante».
Por su parte, el portavoz socialista, Francisco Crispín, reconocía a este rotativo que «formalmente existe un preacuerdo, que se ha alcanzado ahora porque, superado un tercio de la legislatura, era el momento de plasmar la mayoría clara de izquierdas». Además de apuntar que los socialistas podrían asumir sus delegaciones a partir del mismo lunes, el edil del PSPV reconoce que «sigo pensando que hay demasiados liberados, pero no es algo que dependa de nosotros».
Un liberado más
En este sentido, el grupo socialista añadirá uno más a sus ediles con dedicación exclusiva, mientras que unos de sus tres representantes, que no será el propio Crispín, se incorporará a la junta de gobierno.
Desde Compromís, mientras, su secretaria local, Asun Moll, reconocía que la necesidad de contar con un presupuesto ha sido determinante para desbloquear la negociación para la inclusión del PSPV en el pacto de gobierno. «Queríamos estabilidad y es muy importante haberla conseguido con un acuerdo consensuado entre todos», reconoce.
Por su parte, Pablo Abelleira, portavoz de ADN Morvedre y alcade accidental por las ausencias de Quico Fernández y Teresa Garcia, coincidía con el resto de grupos al afirmar que «la valoración del acuerdo es muy positiva, siempre que se cumpla en todos sus puntos». Además de insistir en que el lunes se acabará de perfilar el reparto de delegaciones, el concejal de Urbanismo apuntaba que «estamos contentos por este pacto», que da más garantías a la gestión del gobierno municipal.
