El edil José Vicente Muñoz aseguraba ayer a Levante-EMV sentirse como «un cabeza de turco» del colectivo de EUPV en Sagunt, «como ya pasó en Gilet», tras confirmar su paso al grupo de no adscrito. «Mi gestión ha sido muy buena. He conseguido muchas cosas en las delegaciones de Aguas, en Promoción Económica y en Playas. También he guardado la disciplina de voto hasta el mismo pleno de esta semana. Y ahora no voy a irme del ayuntamiento. Voy a seguir trabajando en él por los ciudadanos», decía.
Muñoz dijo haber comunicado su decisión al resto de grupos «y todos valoran mi gestión». Después de que la asamblea de EUPV le hubiera exigido la renuncia al cargo «por pérdida de confianza» y creer que «no cumplía los deberes del cargo que marcan los estatutos», el edil negó este último extremo y dijo «ser el primero que perdió la confianza en ellos hace un año, cuando me enteré por otros grupos que estaban negociando con mis concejalías y, de hecho, le dieron la de Promoción Económica al PSPV cuando ya había muchos proyectos avanzados».
Además de confirmar que no fue a la asamblea donde se votó revocarle el cargo «porque lo veía una encerrona», opinó que «todo ha tenido que ver con el hecho de no lograr la remunicipalización del Agua, después de que un informe la cifrara en 25 millones, pero es algo que se podría haber exigido si tanto se quería, diciendo de dónde se sacaba ese dinero». Respecto a quienes sostienen que ese informe parecía estar hecho para justificar la imposibilidad de remunicipalizar el servicio, admitió que «pudo ser un error la elección de la empresa que lo hizo, por su vinculación a la firma que es socia del ayuntamiento en Aguas de Sagunt», pero incidió en que la conclusión de ese informe «fue avalada por el secretario municipal» y apuntó que «errores cometemos todos».
