La Conselleria de Sanidad, a través de la directora general de Inspección, Isabel González, se ha dirigido a la empresa concesionaria de la atención sanitaria de la comarca, Ribera Salud, instándole a mantener el servicio que se prestaba en los consultorios médicos de las playas de la Ribera en 2016. Esta orden, de la que no existen precedentes desde que privatizó la gestión sanitaria en la comarca, eleva un tanto más la tensión desatada entre la adjudicataria y el Consell desde que se anunció que no va a prorrogarse el contrato del servicio, por lo que la empresa lo dejará al concluir el mes de marzo de 2018.

La conselleria considera que el Plan Vacacional de Salud ofrecido por los gestores del hospital resulta insuficiente para atender las necesidades de la comarca. En este sentido, muestra su malestar ante la falta de respuesta por parte de la UTE Ribera Ribera a las quejas planteadas desde la conselleria sobre los servicios que se han de cubrir durate el verano. Por ese motivo, insta a la empresa a mantener la apertura del mismo número de centros y consultorios que se fijaron en el Plan de Vacaciones 2016, especialmente los dependientes de la zona básica 10, correspondiente a Cullera, y la 11 (Sueca).

El documento con el requerimiento deja claro que en Sueca el crecimiento de la población estable se sitúa en más de 40.000 personas, mientras que en Cullera supera los cien mil. En esas condiciones, la conselleria defiende que el cierre de algunos de los consultorios y la apertura de otros en horario exclusivamente de mañana, con la consiguiente reducción horaria, supone «no sólo un claro deterioro de la calidad asistencial sino también problemas de accesibilidad en los centros de salud, así como una masificación de pacientes».

El Ayuntamiento de Cullera, gobernado por una coalición entre el PSPV y Compromís, ya planteó sus quejas a Ribera Salud, solicitándole que abriera todos los consultorios de la playa después de conocer que la empresa concesionaria del servicio de atención sanitaria había decidido no poner en funcionamiento para este verano el del Racó, abrir solamente el del Faro dos días a la semana además de haber recortado la asistencia en el Oasis a sólo por la mañana y eliminar las urgencias matinales del sábado.

Esta decisión se tomó, según el propio ayuntamiento cullerense, sin haber informado previamente al municipio a pesar de que el consistorio lleva tiempo insistiendo en la necesidad de mantener estos consultorios para garantizar la atención sanitaria a los turistas que llegan a la playa y evitar el colapso del centro de salud del municipio.

El Ayuntamiento de Sueca, gestionado por Compromís GIPM, también mostró su malestar al conocer que la empresa concesionaria no abriría el consultorio de la playa de Las Palmeras en la actual temporada estival, y anunciara recortes en el servicio del centro de salud del Perelló.

El escrito de la conselleria dirigido a Ribera Salud también alude a fallos de cobertura sanitaria en las poblaciones de Llombai, Catadau y Alfarp, pidiendo que se refuercen los horarios de atención y en especial que se mantenga abierto el consultorio de Catadau en horario de tarde.