Durante su gira oficial por Estados Unidos, la princesa de Asturias vivió el pasado domingo un embarazoso momento: coincidió en un acto con una mujer que llevaba exactamente el mismo vestido que ella.

Los príncipes acudieron a visitar la planta de la farmacéutica catalana Grifols en Los Ángeles y para la ocasión Letizia eligió un vestido cocktail de Hugo Boss en tonos negros y grises, valorado en 629 euros. La princesa se ha aficionado mucho últimamente a esta firma para su armario de sport, para los actos protocolarios confía en la costura de Felipe Varela. Pero la sorpresa vino a la hora de realizar la fotografía de grupo. Una empleada de la planta posaba exactamente con el mismo vestido y además ambas coincidían también en completar el conjunto con una chaqueta negra.

Curiosamente, la princesa Mary de Dinamarca lució hace unas semanas una falda de Hugo Boss con el mismo estampado.