Tres chalés de la urbanización la Canyada de Paterna fueron desvalijados el pasado miércoles en un intervalo de apenas ocho horas, según ha denunciado la Asociación de Vecinos de El Plantío, que tiene contratado un servicio de vigilancia privada. Todo apunta a que se trata del mismo grupo de ladrones que en el fin de semana de los días 6 y 7 de noviembre cometieron otros cinco asaltos a viviendas, una de ellas habitadas. La policía nacional y la local han reforzado la vigilancia, que ya se había extremado después de la primera oleada de robos.

Los últimos asaltos fueron cometidos, según las citadas fuentes, entre las doce del mediodía y las ocho y media de la noche del miércoles. Dos de las viviendas estaban vacías cuando los cacos entraron para llevarse, como siempre, dinero y joyas, pero en la tercera, estaban dentro los dueños. Del mismo modo que en la oleada de los días 6 y 7, en esta ocasión los ladrones también estaban robando en el primer piso mientras las víctimas se encontraban en la planta baja. Y, de igual manera, escaparon en cuanto se vieron descubiertos.

También coincide el método para acceder a los domicilios, así como el uso de guantes y de inhibidores de alarmas. De hecho, en los dos domicilios vacíos los propietarios habían dejado la alarma conectada antes de irse y así seguía al regresar, pero no sonó en la central de la empresa de seguridad.

A por la caja fuerte

Otra de las coincidencias, es que disponen de información sobre sus objetivos antes de entrar en el chalé. La policía ya lo sospechaba, pero lo ha confirmado el hecho de que en uno de los dos chalés sin moradores en los que entraron el miércoles, fueron directamente a por la caja fuerte, pese a que se encontraba oculta en una estancia muy poco habitual: detrás de un armario, en el cuarto de baño. Los cacos consiguieron extraerla de la pared después de abrir un boquete alrededor y se llevaron todo su contenido.