La Guardia Civil ha arrestado a dos hombres acusados de manipular los contadores de la luz de numerosos domicilios de la provincia de Valencia. Los sospechosos, que simulaban ser técnicos de una compañía eléctrica, convencían a sus supuestos clientes para cambiar el contador con la promesa de que rebajarían el consumo y por tanto el gasto en electricidad a final de mes. De esta forma les hacían pagar entre 400 y 600 euros por el servicio.

En algunos casos las víctimas desconocían las verdaderas intenciones de los sospechosos y pensaban que se trataba de una nueva compañía eléctrica. En otros casos por contra, los propios propietarios contrataban los servicios de estas dos personas para que les manipularan el contador de la luz y así pagar menos en la factura.

Las investigaciones comenzaron el pasado mes de septiembre tras recibir diversas denuncias de particulares y de la propia empresa suministradora de luz. Investigadores de la Benemérita iniciaron así la denominada «Operación Chispazo 6» para tratar de identificar a los autores de este fraude.

Fruto de las gestiones realizadas, los agentes comprobaron que se trataba de dos personas, uno de los cuales conseguía convencer al cliente para que cambiase de empresa suministradora de luz mediante la promesa de rebajar el consumo eléctrico. Mientras que el otro se personaba en el lugar identificándose como técnico de la nueva compañía, retiraba el precinto oficial para manipular el contador y lo sustituía por otro sin la identificación del instalador. El pasado 22 de noviembre se procedió a la detención de los sospechosos, de 32 y 57 años y nacionalidad española, acusados de nueve delitos de fraude de fluido eléctrico, cinco delitos de estafa y uno de intrusismo profesional.