Una norma que contenta a unos pocos aunque resulta muy negativa para otros. La reforma laboral del Gobierno de Mariano Rajoy cumple cuatro años desde su entrada en vigor en medio de la crítica de los sindicatos, el visto bueno de las organizaciones patronales y la incertidumbre de los analistas económicos. La sangría del paro se ha detenido, si bien son muchos los expertos que atribuyen esta situación al crecimiento del Producto Interior Bruto (PIB) en toda España tras la recuperación del consumo y la mejora de las exportaciones, entre otros indicadores.
Hay que tener en cuenta que todavía nueve de cada diez contratos en España son temporales. Además, la Autoridad Fiscal ha cifrado la pérdida de ingresos en unos 15.000 millones como consecuencia de la combinación de la temporalidad en el empleo y la devaluación salarial. Respecta al Salario Mínimo Interprofesional (SMI), llama la atención que en cuatro años tan solo ha subido 7,2 euros, lo que explica que los sindicatos pidan dignificar este salario hasta alcanzar los 800 euros en el 2017. Por otro lado, se estima que un 35 % de los asalariados cobraba en 2014 menos del SMI, tres puntos por encima que en 2011. En esta situación se encontraban casi 5,9 millones de trabajadores en toda España.
Sustitución de contratos
A la hora de hacer balance, el secretario de Empleo y Formación de UGT-PV, Raúl Roselló, puntualiza que la Comunitat Valenciana cuenta con 22.400 ocupados más que hace cuatro años. Ahora bien, también se ha producido un incremento de 32.700 puestos de trabajo a tiempo parcial respecto a principios de 2012. «Sin duda, se ha producido una sustitución de contratos a tiempo completo por relaciones laborales a tiempo parcial, pues ya representan una tercera parte del total de los contratos en el caso de las mujeres». Y destaca que la tasa de cobertura de los parados valencianos ha pasado de una tasa del 55,7 % al 46,1 % entre 2012 y 2016.
Según el informe presentado esta pasada semana por la confederación sindical de UGT, revisando los resultados entre el periodo 2012-2015 alcanzados en el mercado de trabajo en su sentido más amplio (desde la evolución general, la contratación, la prestaciones, los expedientes de regulación de empleo (ERE), la negociación colectiva, y los salarios), «se puede concluir que la reforma laboral ni ha creado empleo ni logró frenar su destrucción». En cambio, sí ha conseguido algunos «logros» que de no derogarse la reforma en el futuro inmediato tendrá consecuencias de debilitamiento del mercado de trabajo.
Positiva para la patronal
Mientras tanto, la Confederación Empresarial Valenciana (CEV), que preside Salvador Navarro, sostiene que «la reforma laboral ha sido de utilidad para afrontar la crisis económica tan profunda que hemos padecido», ya que ha permitido contener en los peores momentos de destrucción de empleo las cifras de extinciones laborales, fundamentalmente a través de las inaplicaciones de determinadas condiciones laborales de los convenios colectivos (el coloquialmente llamado descuelgue salarial) y por las políticas de moderación salarial de los Acuerdos Interconfederales de Negociación Colectiva.
La patronal también sostiene que ha contribuido a instalar en el ADN de las empresas mecanismos de flexibilidad interna, que en definitiva son los que permiten adaptarse a las circunstancias del mercado, propiciar la productividad y competitividad de las empresas y mantener el empleo. Con todo, la organización que lidera Navarro indica que hay otros aspectos en que la reforma ha fracasado. Uno es la dualidad del mercado laboral, con unas tasas insoportables de temporalidad y se sigue manteniendo por un doble motivo. También advierte del elevado coste de la extinción laboral que sigue propiciando una desconfianza a la hora de realizar contratos indefinidos, así como la debilidad de las políticas activas de empleo que son incapaces de situarnos por debajo de tasas del 20 % de paro y de casi el 50 % en colectivos como los jóvenes
Desde la perspectiva laboral, «la CEV va a poner todo su empeño en el actual proceso de concertación social con la Generalitat para que se propicien políticas y líneas de actuación en favor de la creación y consolidación de empresas y la generación de empleo estable», asegura la patronal.
