José Luis y Javier Bosch, padre e hijo, junto con Paul Roñaren, arrancaron hace algo más de tres años un proyecto que empieza a volar alto. Lo hicieron desde Paterna, pero hoy tienen socios y aliados en medio mundo. La empresa valenciana de software para baloncesto NBN23 ha llamado la atención de jugadores y excusadores como la estrella del baloncesto europeo Sergio ´Chacho´ Rodríguez, el valenciano Víctor Claver, el ex ACB Rafa Vidaurreta, la exinternacional valenciana y hoy entrenadora Ana Montañana, la ganadora de tres anillos de la NBA femenina Amaya Valdemoro o la exestrella de la ACB Johnny Rogers. Todos ellos han acudido a sus rondas de financiación, que ya superan el millón.
En esencia, su software, llamando Competition, sirve para digitalizar todo el proceso de una competición: desde la inscripción de jugadores, clubes, árbitros, auxiliares, agentes delegados... hasta la generación de la competición, reglas, calendarios, fases, cruces y la propia digitalización del partido, con todas las estadísticas posibles, ya sean tiros, faltas o cualquier lance del juego. Todo en una app, todo gestionado en tiempo real y actualizado cada 20 segundos. Adiós al papel que todavía sigue siendo el soporte de las actas digitales de competiciones tan relevantes como la Liga Universitaria de Estados Unidos. NBN23 mete en el siglo XXI la figura del oficial de mesa del partido.
La aplicación tiene mejores prestaciones que muchas ligas profesionales, pero está enfocada a la base. «Queremos dar una experiencia profesional a la liga local, de barrio, al tres por tres, a la gente mayor: que todo el mundo que juegue a un deporte pueda tener una vivencia inolvidable y dinámica. Queremos democratizar la tecnología para el deporte base», resume Miguel Bullón, presidente ejecutivo de la empresa.
Según defiende, el desarrollo de esta empresa ayuda a todos: al padre que puede seguir las incidencias de su hijo en tiempo real esté donde esté; al jugador, que pueden conocer su rendimiento; al entrenador, para conocer cómo le está haciendo daño el rival durante el partido. «Hay quien nos ha dicho: ´He ganado el partido gracias a vosotros´», asegura Bullón.
La tecnología de esta firma ha seducido al mundo del basket y a las estrellas de un deporte huérfano de innovaciones. En poco tiempo, se han convertido en proveedores de las federaciones autonómicas y la española para digitalizar torneos, ha llegado a Turquía y México y están entrando por la puerta grande en Estados Unidos. Allí ya han digitalizado torneos junior organizados por la NBA.
Su último hito -el mayor hasta la fecha- ha sido un acuerdo con el fabricante norteamericano de balones Spalding, firma histórica, fundada en 1876, autores del primer acta de papel y uno de los mayores proveedores del baloncesto. Han creado una marca blanca de su software para ellos: el Spalding Scorecard Powered by NBN23.
«Es una puerta de entrada por todo lo alto. Spalding tiene acuerdos con el 50% de las ligas. Nuestro apoyo les sirve para entrar en el mundo digital. Ellos tienen productos más clásicos. Esto es un paso al mundo tecnológico», explica Bullón. Con este producto, la tecnológica valenciana va a entrar en los mercados estadounidense y chino, donde Spalding tiene un fuerte presencia.
Este acuerdo y el apoyo de los inversores llevará a la firma al equilibrio económico en 2019, según sus cálculos. En estos momentos, se encuentra en plena búsqueda de financiación precisamente para abordar los mercados internacionales. La tecnológica ya ha levantado un millón en varias rondas de financiación. Busca dos millones más en próximas rondas.
Además del acta digital, NBN23 desarrolla otro producto (performance) enfocado a mejorar el rendimiento de los profesionales. Se trata de una tecnología de posicionamiento en tiempo real, mediante un sensor que se integra en el pantalón del jugador y permite conocer de forma precisa los datos que se generan: distancias, aceleraciones, ocupación del espacio... «Son datos precisos para optimizar los ejercicios», explica Bullón. Varios equipos de la ACB y de la NBA ya utilizan esta aplicación. En esencia, la tecnología de posicionamiento es la misma que han implementado en otro producto, en fase de búsqueda de socios, enfocado a la seguridad de los niños en las piscinas, como un asistente para los socorristas que alerta si el menor pasa mucho tiempo bajo el agua.
Y es que estos ´locos´ del basket no quieren quedarse solo dentro de la cancha. «En el futuro daremos el salto a otros deportes. Somos gente de basket, con contactos y conocimientos. Sabemos dónde está el nicho de mercado, pero queremos ir al multideporte sin perder el foco de ser la referencia mundial del basket», concluye Bullón.
