El informe de tesorería de la Entidad Metropolitana para el Tratamiento de Residuos (Emtre) revela que el 0,74 % de las viviendas no han abonado la tasa de tratamiento de residuos (tamer) que se incluye en el recibo del agua, según explicó el exalcalde de Godella y portavoz socialista en la Emtre, Voro Soler. Esto significa que más de 5.700 viviendas de las 776.000 de Valencia y l'Horta no han hecho frente a este factura en los últimos meses, por lo que las empresas suministradoras les podrían cortar el agua en breve.

Este informe fue desvelado con motivo de la aprobación definitiva por parte de la asamblea de la Emtre de una reducción del 12 % en la tasa tamer, que se aplicará a partir del 1 de enero de 2013. Esta modificación del pago se realizó por la presión vecinal tras subirla la Emtre en 2011 un 152 % de media. La medida se aprobó con los votos a favor del PP, mientras que el PSPV votó en contra y Compromís y EU se abstuvieron.

La presidenta de la Emtre, Maria Àngels Ramón-Llin, aseguró que esta bajada de la tasa, que se ha realizado al recortar gastos de la entidad, "continuará en 2013 y 2014" y afirmó que es una muestra de que "se ha conseguido poner rigor en la entidad", anteriormente gestionada por el concejal del Ayuntamiento de Valencia Ramón Isidro Sanchis.

El socialista Soler defendió que había votado en contra de la reducción de la tasa porque "es evidente que la distribución de la carga de esta tasa no se ha hecho de una forma equitativa, sino de forma injusta y arbitraria". El alcalde de Godella explicó que las viviendas que consumían más de 195 metros cúbicos de agua en 2011 pagaban más de 190 euros y, con la revisión, abonarán un 39% menos (123), mientras que el vecino con un consumo que no llega a los 65 metros cúbicos se le aplica un incremento de más del 150%. "Hay vecinos que pagarán 75 euros más, que son justo quienes menos consumen, y otros justo 75 euros menos", concretó Soler, quien presentó alegaciones por una bajada "insuficiente".

En la asamblea de la Emtre también se debatió el aumento del pago por la gestión de los recibos de la Tamer, que con la subida de la tasa pasó de 900.000 euros a 2,6 millones.