El muelle para cruceros de última generación construido en la ampliación norte del Puerto de Valencia, a espaldas de la Marina Real Juan Carlos I, recibirá a los primeros viajeros "a finales de junio". Los cruceristas no tendrán que atravesar como ocurre ahora la zona industrial portuaria. Para facilitar el tránsito de los cruceristas, la Autoridad Portuaria ha proyectado un vial de dos kilómetros que conectará directamente los muelles con la marina real y que discurre en buena parte por el trazado de la F1. Los cruceristas podrán recorrer en cinco minutos los dos kilómetros que separan el nuevo muelle de la marina en autobuses lanzadera.

El vial no será de uso exclusivo para cruceristas, según explicó ayer el director de Proyectos de la APV, Marcelo Burgos, durante una visita a las obras a la que asistieron el presidente de la APV, Rafael Aznar, la delegada del Gobierno, Paula Sánchez de León, y el teniente alcalde Alfonso Novo, que acudió en sustitución de la alcaldesa Rita Barberá, que ha suspendido su agenda por motivos familiares. La APV ha proyectado un paseo con aceras anchas (cuatro metros), arbolado y un carril-bici que además de crear un entorno más amable que mejore la primera imagen que reciben los cruceristas sirva para avanzar en la integración puerto ciudad.Los cruceristas llegarán a una explanada de 4.350 metros cuadrados donde habrá un aparcamiento con capacidad para 30 autobuses. En esta fase no está prevista ninguna edificación en la explanada.

El nuevo vial proyectado por el puerto bordeará la dársena exterior, cruzará por las transversales donde se encuentra la recta más larga del circuito de F1, hasta llegar al Tinglado número 5 y al Edificio del Reloj.

El vial discurrirá por terrenos que, cuando se confirme la cesión de la dársena a la ciudad, pasarán a ser propiedad del ayuntamiento que a su vez los cederá al Consorcio Valencia 2007.

Fuenes de la APV explicaron ayer que la ejecución del vial tal como lo ha proyectado el puerto está condicionada por la celebración de la F1. Si la competición sigue celebrándose, el paso de cruceristas quedaría interrumpido los días que dure la competición y se desviaría el tránsito por el vial exterior de servicio portuario. Además, si las carrears siguen celebrándose se tendrá que adaptar el diseño del vial. En la marina real se optó por instalar mobiliario, jardinería y señalización móvil como solución para compatibilizar el circuito urbano con la actividad normal.

La Autoridad Portuaria de Valencia calcula que para finales de junio finalicen las obras del primero de los tres atraques que contempla la infraestructura. La primera fase de la obra, adjudicada a Cyes, Sacyr y Somagues, se completará en septiembre cuando acaben las obras de la segunda línea de atraque. La obra se licitó por 30 millones de euros y se adjudicó por 21.

Sin noticias de la cesión

Con los muelles para grandes cruceros (hasta 362 metros de eslora) se espera que Valencia supere en 2013 el medio millón de cruceristas recibidos. El puerto sigue apostando por el turismo de cruceros alentado por las buenas cifras obtenidas en 2012, año en el que se han recibido un 29% más de cruceristas en un contexto de pérdida de viajeros en todo el sistema portuario español. Rafael Aznar explicó que con los nuevos muelles, el puerto de Valencia podrá recibir los cruceros "del máximo tamaño". Para la construcción de los muelles se han ganado 84.000 m2 al mar.

Aznar y Novo anunciaron que "la próxima semana, seguro," el puerto y el ayuntamiento "cerrarán" el convenio de cesión del suelo y a partir de ahí habrá que seguir esperando el informe del Ministerio de Hacienda y el acuerdo del Consejo de Ministros.