La Asociación de Vecinos Devesa-El Saler ha pedido al Ayuntamiento de Valencia y al propio Parc Natural de l'Albufera un plan de emergencia para las urbanizaciones de la Devesa. Los vecinos temen, ante la llegada de un verano cálido con alto riesgo de incendios forestales tras una primavera extremadamente seca, que cualquier fuego en el parque natural termine con casi 6.000 personas, entre vecinos y visitantes, encerradas en una inmensa ratonera en la que los dos únicos viales para salir de la Devesa también son de entrada y desembocan en la CV-500 sin preferencia de paso.
La entidad vecinal, a través de un documento al que ha tenido acceso Levante-EMV, ha pedido al consistorio, al parque natural, a la Oficina Técnica de Devesa-Albufera y a Bomberos un plan especial de evacuación de los núcleos urbanos, en forma de urbanizaciones, que hay dentro del parque natural. Así, el informe hace hincapié en la necesidad de habilitar dos vías «impracticables a día de hoy» para que los vehículos puedan abandonar el parque en caso de emergencia. Uno de ellos es el que unía el Hotel Sidi Saler con el polideportivo, «cerrado el paso mediante un cadena». «Entendemos el cierre del camino», dicen los vecinos, «pero no apoyamos que el camino esté impracticable para vehículos». Este vial se bifurcaría y desembocaría en el propio pueblo de El Saler y en una rotonda de grandes dimensiones que se encuentra pasado El Saler en dirección sur. El otro vial al que se refiere la asociación es el que comunicaba las torres de Proval V-VI con la CV-500, que se convertiría en una salida hacia el sur, principalmente para los vecinos de la urbanización Proval, encerrados, según dice Ana Gradolí, vicepresidenta de la entidad, «en una auténtica ratonera».
El documento habla de otros dos viales: el que sale desde la Casbah hacia el Estany de Pujol, más allá de la gola del mismo nombre, y el que sale desde la curva de ese mismo vial enrte las torres de Collvert y las de Proval VII-VIII en la misma dirección. Estos caminos «se abrirían al paso en caso de incendio forestal permitiendo poder evacuar a los residentes y visitantes por el vial más adecuado, dependiendo de la dirección del fuego».
Limpieza del monte
Los vecinos también explican en el informe que en varias torres de apartamentos «las ramas de los pinos alcanzan ventanas, terrazas o balcones». Por ello, y por la falta de perímetros de seguridad en torno a los edificios, siempre según la entidad vecinal, exigen «trabajos de limpieza de vegetación, realizando clareos alrededor de las urbanizaciones». Según el cálculo vecinal, haría falta limpiar unas 30 hectáreas, teniendo en cuenta una distancia perimetral de 50 metros desde cada bloque de viviendas. De esas 30 hectáreas, aproximadamente un 40 % son zonas ajardinadas o con vegetación no arbustiva, por lo que, explica, la superficie se reduciría aún más.
Los vecinos indican, además, que sería necesario señalizar las salidas de emergencia e instalar semáforos en la CV-500 con prioridad de paso para los viales para agilizar la huida de la Devesa en caso de incendio forestal.
