Varias asociaciones de vecinos de Ciutat Vella han criticado la decisión de la empresa municipal Aumsa de vender a cualquier vecino de Valencia las plazas de garaje de tres aparcamiento del centro histórico. Frente a esto, han pedido que se abaraten los precios y los alquileres de esas plazas para que los vecinos de la zona puedan ocuparlas. Con la salida que ha buscado el ayuntamiento, dicen, lo que se alimenta es la especulación y se incrementa el tráfico en el centro, que es lo que están intentando evitar en todas las ciudades, dicen.
La empresa municipal Aumsa ha decidido en su último Consejo de Administración ofrecer a toda la ciudad más de doscientas plazas de garaje que hay vacías en los aparcamientos de la Plaza de Badajoz, la calle En Bany y la calle Triadors. Antes esas plazas estaban reservadas, bien en alquiler, bien en compra, a los residentes en un radio de 500 metros, es decir, a los vecinos del centro histórico.
Y eso no ha sentado bien en el colectivo. De hecho, nada más conocerse la noticia, Trini Piquer, en nombre de la Asociación de Vecinos del Carmen, la Coordinadora de Ciutat Vella y la Asociación de Usuarios de Vivienda Pública, se dirigió al gerente de Aumsa para hacerle llegar su malestar.
Según explicó, el problema de estas plazas de aparcamiento es que el alquiler está en 90 euros al mes, un precio fuera de mercado e inaccesible para la mayoría de los vecinos, lo mismo que los precios de venta. De hecho, asegura Trini Piquer, cerca de allí, en la Plaza Viriato, hay un aparcamiento de la Generalitat cuyos precios están más baratos, en torno a los 70 euros al mes.
Así pues, su propuesta, ya conocida por los responsables municipales, es que los alquileres bajen a 40 euros, tanto para los que ya meten allí sus coches como para los nuevos, y además se ofrezcan esas plazas a los residentes que ahora pagan zona naranja. De esa forma se ocuparían todas las plazas y además se quitarían coches de las calles, que es lo que están demandando las ciudades modernas.
Miedo a la especulación
Abrir esos garajes a cualquier vecino de la ciudad lo que traerá, a su juicio, es especulación de aquellos que tienen dinero y quieren invertir. En la calle Triador, por ejemplo, las plazas valen a 22.000 euros.
Así mismo, se atraerán coches al centro de la ciudad, tantos como plazas de garaje se vendan, algo que rechazan los vecinos, los partidos de la oposición y las entidades sociales vinculadas al transporte sostenible, implicadas precisamente en el retroceso del vehículo privado.
Para la adquisición o alquiler de estas más de doscientas plazas de aparcamiento, las nuevas condiciones impuestas por Aumsa son residir en el área de influencia, que se extiende a todo el término municipal de la ciudad de Valencia; tener una vivienda dentro del término municipal; trabajar por cuenta propia o ajena dentro en la ciudad; ser persona jurídica que ejerza su actividad en el término municipal; y ser «inexcusablemente» poseedores de un vehículo. Además, sólo se asignará una plaza por cada vivienda y local.
Los vecinos advierten, en cualquier caso, que estarán muy atentos a las entas, porque temen que ya haya compradores listos para hacer negocio con estas nuevas condiciones.
