Fernando Giner, economista y profesor de Marketing de 51 años, casado y con cuatro hijos atiende a este diario en la sede de Ciudadanos (Cs) ubicada en la céntrica calle San Vicente [el espacio asignado en el ayuntamiento a su grupo aún está en obras]. Este valenciano, del barrio de Russafa, posibilista y perfecto «gentleman», ha dejado aparcado un próspero despacho de consultoría empresarial tras sentir la llamada de la política y la ilusión de un cambio en la ciudad. Los sondeos preelectorales le auguraban un papel clave en el nuevo gobierno municipal pero la debacle del PP le ha llevado a la oposición.
¿Volverá a fiarse de las encuestas?
Las encuestas nos daban cinco o seis concejales y hemos llegado a seis, son 64.300 votos y unos resultados extraordinarios. Lo que ocurre es que la composición del consistorio nos ha llevado a la oposición y en eso vamos a estar, para propiciar un cambio profundo y tranquilo en Valencia. Nadie se va a sentir defraudado. Vamos a hacer una oposición firme, constructiva y apoyando donde esté el sentido común.
En su día dijo que si no era alcalde prefería estar en la oposición para cambiar desde ahí la ciudad. ¿Cómo va a hacerlo?
Tenemos un proyecto de ciudad y un conocimiento del desarrollo de la actividad económica y la generación de riqueza. Estamos preparados y vamos a presentar propuestas al ayuntamiento en ese sentido porque creemos que esta nueva etapa política necesita de esa generosidad.
¿Alguna propuesta a la vista para el tripartito?
Hemos presentado ya una solicitud para conocer el número de personal no funcionario del ayuntamiento. Queremos saber cuánta gente hay trabajando sin oposición en el ayuntamiento y en las empresas para medir la eficiencia del ayuntamiento. El ciudadano tiene derecho a saber estos datos y también a conocer las cuentas municipales, por eso proponemos también la implantación de un sistema informático de «open data» (datos abiertos), que es bastante sencillo y rápido de aplicar. Está muy bien que el alcalde [Joan Ribó] abra el balcón del ayuntamiento a los ciudadanos, es genial, pero también debe abrir las cuentas municipales. Por otro lado, queremos que se dé apoyo financiero y social a los emprendedores con medidas como bonificaciones en el transporte público. Siendo creativos se pueden facilitar mucho las cosas.
De momento, el nuevo Gobierno no les ha tenido en cuenta en la primera comisión de trabajo creada para el Cabanyal...
Me siento profundamente decepcionado de que no nos hayan invitado. Yo firmé el pacto [preelectoral a favor de la rehabilitación del Cabanyal] porque me parecía justo y nos posicionamos en contra de la actitud de la anterior alcaldesa con el barrio. Ciudadanos debería estar ahí representando a los 64.000 valencianos que nos han votado.
¿Qué le parece el nuevo Gobierno? ¿Está trabajando a buen ritmo?
Yo entiendo que no estamos yendo a buen ritmo, no se está hablando de generación de empleo, riqueza y turismo y ya se debería haber empezado a hacer algo. No veo la planificación y eficacia necesarias. Estas nuevas áreas que se han establecido puede obedecer bien a una voluntad real de transversalidad o bien a un reparto de poder. Y ahí no nos van a encontrar. Es muy pronto para juzgar, pero he visto gestos y declaraciones y no he escuchado nada de generación de empleo y riqueza que es nuestra prioridad.
¿No les resta operatividad no poder disponer aún de sus despachos en el ayuntamiento?
Estamos en un despacho compartido, con cuatro sillas, bien no estamos, la verdad, pero vamos a poner nuestra mejor cara aunque nos reste operatividad. En esto vamos a facilitar las cosas, pero nos gustaría que este diálogo y talante colaborador sea recíproco.
