El Ministerio de Fomento licitó el pasado 17 de septiembre el proyecto arquitectónico de la estación de la Sagrera de Barcelona, la mayor infraestructura por volumen de inversión (650 millones de euros) que se ejecutará en los próximos años en la ciudad condal. Mientras Fomento impulsa la mejora urbana y modernización de las infraestructuras ferroviarias de la capital catalana, la Estación Central de Valencia sigue aparcada «sine die» y pendiente de una modificación del proyecto que diseñó César Portela para abaratar sus costes.
El Ministerio de Fomento tiene pendiente, además, completar el canal de acceso ferroviario, esto es, soterrar las vías para que el Parque Central pueda avanzar, así como ejecutar el túnel pasante que cruzará la ciudad para dar salida hacia Castelló al tráfico ferroviario, una infraestructura si cabe más incierta que Fomento da por aparcada.Todas ellas infraestructuras comprometidas en el convenio firmado en 2003 por el Ministerio de Fomento, Adif, Ayuntamiento y Generalitat y cuyo coste se estimó entonces en 800 millones de euros, pero que con el paso de los años se encareció hasta los 1.200, 200 de ellos para la estación.
La estación de la Sagrera también ha sufrido varias modificaciones para abaratar su coste y revisar el modelo de financiación, basado en gran medida en las plusvalías de las zonas comerciales (6.000 m2). El anuncio de la licitación del proyecto arquitectónico de la Sagrera se produjo pocos días después del encuentro que mantuvo la alcaldesa, Ada Colau „que no considera que la estación sea prioritaria en este momento„, con la ministra de Fomento Ana Pastor. Colau, sin embargo, no está conforme con el modelo de financiación basado en las plusvalías comerciales e inmobiliarias que se recogió en el convenio que Barcelona firmó en 2013 con Fomento para ejecutar las infraestructuras ferroviarias pendientes.
El alcalde de Valencia, Joan Ribó, también se reunió el pasado 3 de septiembre con la ministra Pastor, un encuentro del que el alcalde salió «muy decepcionado» y que no se ajustaba a lo anunciado antes de las elecciones de mayo por la anterior alcaldesa, Rita Barberá, quien dijo que existía un «compromiso cierto» del ministerio de ejecutar las inversiones del Parque Central y el túnel de Serrería. Lo cierto es que según el nuevo gobierno del tripartito, que se niega a costear parte de las infraestructura como sugiere ahora Fomento, el ministerio todavía no ha entregado el nuevo proyecto de la estación y el canal de acceso.
El convenio del Parque Central de 2003 preveía también un edificio comercial de 12 alturas junto a la Estación Central para financiar parte de la operación.
Ribó reprochó ayer, en una comparencia conjunta con el conseller de Hacienda, Vicent Soler, para denunciar la infrafinanciación que sufre la Comunitat, que la ex alcaldesa y actual senadora no haya presentado enmiendas en el Senado para que se incluyan en los presupuestos las inversiones anunciadas por el PP y recordó el reciente acuerdo plenario de todos los grupos municipales para exigir una financiación justa al Estado. Ribó también criticó ayer la regla de gasto del ministro Cristobal Montoro,«un corsé» que hipoteca la posibilidad de los ayuntamientos de hacer inversiones porque fija como prioridad el pago de la deuda.
