El Ayuntamiento de Valencia ha iniciado una nueva regulación de las 115 plazas de aparcamiento reservadas a vehículos autorizados, una regulación mucho más exigente que ha permitido incluso anular algunas de ellas. Las primeras en desaparecer serán las 17 que hay en la Avenida de Suecia, frente al estadio de Mestalla.

Según explicó el concejal de Movilidad, Giuseppe Grezzi, cuando llegaron al ayuntamiento se encontraron con más de un centenar de plazas de aparcamiento que se reservaban a personas y colectivos usuarios de las instalaciones municipales pero que en la práctica se utilizaban de forma «irregular».

Ante esta situación, dice, se pidió la relación de usuarios al anterior equipo de Gobierno y, según el concejal, no se la han facilitado, por lo que han decidido anular todas las autorizaciones con fecha 1 de septiembre y hacer nuevas concesiones, utilizando, eso sí, criterios mucho más rigurosos, es decir, especificando su función y el trabajo que realiza en las instalaciones municipales.

El «plazo» para pedir esas autorizaciones finalizó el pasado martes y se ha comprobado «una notable disminución» del número de peticiones, por lo que el consistorio ha procedido a clausurar algunas ellas. Las primeras serán las 17 que hay en la Avenida de Suecia y la previsión es actuar de manera similar en otras calles de la ciudad, entre ellas la Plaza del Ayuntamiento o el entorno de Tabacalera.

«En nuestra propia Concejalía „explica Grezzi„ sabemos que antes algunas personas disponían de tarjetas, pero ahora mismo ningún empleado tiene una, ni el jefe de servicio, ni las jefas de Sección, porque ya no se concede como una distinción en términos de privilegio, ni es necesaria para realizar el trabajo, ni siquiera en Movilidad». «Quien tiene que moverse para hacer su trabajo regular dispone del parque móvil del Ayuntamiento, los servicios también disponen de tarjetas de EMT para realizar inspecciones y la movilidad entre edificios se realiza con una furgoneta, mientras que para el acceso y la salida del puesto de trabajo tiene la misma libertad y facilidades que el resto de sus compañeros y la ciudadanía en general», añadió ayer el concejal.