El Ayuntamiento de Valencia inauguró ayer la trigésimo segunda edición de la Semana de las Personas Mayores con la que quiere «remarcar y visibilizar» el «protagonismo que le corresponde en justicia» al colectivo de 200.000 personas de más de 60 años que tiene la ciudad. Así lo resaltó el alcalde, Joan Ribó, durante el acto celebrado ayer, en el que por primera vez, junto a los presidentes de los centros municipales de personas mayores, acudieron representantes de otro tipo de asociaciones que trabajan con la tercera edad e incluso del colectivo de iaioflautas.

Ribó indicó que 1 de cada 4 personas de Valencia son mayores de 60 años y que la tendencia es a aumentar, por lo que «las políticas municipales deben ir cada vez más dirigidas a ellos» y reivindicó «la perfecta compatibilidad entre la condición de persona mayor y la plena actividad ciudadana».

El concejal de Personas Mayores, Joan Calabuig, recordó al edil Joan Ballester, ya fallecido, que creó hace 32 años la Semana de las Personas Mayores y aseguró que «los mayores se merecen el esfuerzo del Ayuntamiento por devolverles todo lo que han dado».

Durante el acto, el ayuntamiento hizo entrega de sendos reconocimientos a los presidentes de los centros municipales de mayores de Benimaclet, Andrés Morell; Benimamet, Salvador Beltrán, y Ciutat Vella, Luis Fortea, «por su trabajo por los mayores». Igualmente, se hizo entrega del diploma de «Las mejores personas mayores» al artista fallero Vicente Luna, a la arquitecta y activista por los derechos de las mujeres Trinidad Simó y a la Asociación Valenciana de Enfermos de Alzheimer.