El Grup Cristià Pacifista ha querido también reconocer la tarea de objetores de conciencia e insumisos valencianos, que «apostaron por la cultura de la paz, el desarme y el gasto social», según el colectivo. Para este grupo de activistas, estos valencianos conforman un «valioso legado que debe llenar la autoestima de los ciudadanos». Una herencia, que sin embargo, se ve dañada por señas «propias de un nacionalcatolicismo anacrónico», según el grupo cristiano. El colectivo pretende, con estas palabras, conseguir la retirada de mandos militares y de las autoridades institucionales de las procesiones del Corpus. Una tarea que ya empezó a efectuar el alcalde, con su decisión de mantenerse al margen de estos actos. levante-emv valencia