El senador de Compromís Carles Mulet trasladará al Gobierno la necesidad de iniciar todos los trámites para la cesión a la Generalitat del antiguo Convento de Predicadores de Valencia, ahora conocido como Convento de Santo Domingo, para que se incorpore al patrimonio público valenciano. El complejo, cuya primera piedra fue colocada por el rey Jaume I en 1239, fue sede de la Orden de Predicadores, y entre sus muros vivieron, entre otros, san Vicent Ferrer y san Lluís Bertran. Desde la coalición han resaltado que hace unas semanas el edificio ha sufrido diversos «atentados». Por ejemplo, la capilla de San Vicente Ferrer sufrió una agresión al ser repintados con purpurina sus dorados originales, al tiempo que los estucos fueron pintados con pintura plástica.